Los Mossos de Esquadra han detenido a tres personas, a una pareja y al dueño de una peluquería del barrio de Sants de Barcelona, por dedicarse presuntamente a traficar con cocaína, que repartían a domicilio. Los consumidores contactaban con el vendedor a través de un aplicación de mensajería instantánea. Primero con un mensaje o una llamada telefónica. Posteriormente el vendedor, a través del mismo sistema, pedía al comprador el punto de encuentro, estipulaba el tiempo de entrega y preguntaba por la cantidad en unidades, sin concretar de qué encargo se trataba y sin dar ninguna palabra clave. Pasado el tiempo indicado, el comprador salía al punto acordado y se hacía la operación en la vía pública. Habiutalmente vendía 50 euros, que es el equivalente a un gramo de cocaína. 

La investigación empezó en agosto de este año, cuando agentes de los mossos interceptaron una compraventa de droga en el distrito de Les Corts y decomisaron al comprador un poco más de un gramo de cocaína que acaba de comprar. Al continuar las pesquisas descubrieron que otras tres operaciones similares se habían hecho con el mismo método. Y a partir de ahí descubrieron el vehículo que hacía las entregas y la peluquería de Sants, en la que paraba uno de los detenidos, incluso cuando estaba cerrada. 

A raíz de la investigación los mossos detuvieron a una pareja de dominicanos, de 42 y 38 años que vivían en Santa Coloma de Gramenet. Él era el que repartía la cocaína a domicilio, habiéndola llevado incluso a Mataró. También ha quedado detenido el propietario de la peluquería de Sants, de 40 años, dominicano y que colaboraba con ellos. En el registro de la vivenda de la pareja, los mossos encontraron 10.000 euros en billetes de 50, más de 200 gramos de cocaína, sustancias para el corte de la droga y una pequeña prensa.

Los detenidos pasaron a disposición judicial y el juez les dejó en libertad con cargos con medidas cautelares como la retirada del pasaporte.