El Pirineo leridano ha registrado una ocupación del 90% durante el puente de la Purísima, según el Patronato de Turismo de la Diputació de Lleida. La vicepresidenta, Rosa Pujol, ha valorado muy positivamente los datos. Las once estaciones de esquí leridanas han vendido más de 65.000 forfets durante estos tres días, unos 20.000 más que el año anterior, que duró un día más.

Por otro lado, las estaciones gironinas también celebran que el puente ha sido “espléndido” tanto en las pistas como en la hostelería de la zona. El director de la Molina, Xavi Perpinyà, ha explicado que “estan muy contentos con el arranque de la temporada. De la estación de Girona destacan los 111 kilómetros de pistas que se han abierto juntamente con Masella. Perpinyà ha señalado “que creen que es una de las mejores oberturas de dominio a nivel europeo”. Estos buenos datos hacen ser optimista al sector que espera una temporada de invierno "buena" especialmente después de la "gran" calidad de la nieve y de los grosores acumulados gracias a las últimas precipitaciones.

La parte negativa del puente se la han llevado las casas de les Terres de l'Ebre, que han registrado un 30% de la ocupación. El portavoz de l'Associació de Turisme Rural de les Terres de l'Ebre, Juanjo Bel, ha afirmado que los datos son negativos, ya que “ni en los peores años de crisis” se habían registrado cifras tan bajas. El buen tiempo no ha propiciado un incremento de las reservas de última hora en la cuarentena de casas rurales asociadas a la Asociación de Turismo Rural de las Terres de l'Ebre. Tan solo una de ellas ha conseguido revertir la situación y, finalmente, ha alquilado la propiedad. "El puente no ha ido bien, la previsión se ha cumplido, con un pequeño incremento de un 2%, que es muy poco", ha lamentado Bel.