Un grupo de personas ha destrozado este jueves el centro de menores de Torredembarra y ha herido a dos de los residentes, uno de ellos de gravedad. Los hechos han sucedido después de una manifestación vecinal que reclamaba más seguridad a raíz de varios delitos cometidos por unos jóvenes mayores de edad que viven en una casa ocupada. Después de la concentración un grupo fue por libre a buscar a algunos de los ocupas y habría acabado agrediendo a un residente del centro de menores de la localidad. El herido se encuentra ingresado en el hospital Santa Tecla de Tarragona con la nariz rota.

Según han informado fuentes de los Mossos d'Esquadra, la concentración transcurrió sin incidentes, pero posteriormente un grupo de unas ochenta personas se desplazó a la calle Mimosas con la intención de echar a los jóvenes de la vivienda ocupada. Según ha apuntado el consistorio en un comunicado, los manifestantes profirieron "insultos racistas y amenazas", pero una línea policial les valló el paso.

Posteriormente, un grupo de personas que protestaban en ese mismo lugar marcharon hacia el parque de Cal Llovet y agredieron un chico de 18 años que reside en un centro de menores que la Generalitat tiene en el municipio. El joven consiguió refugiarse en un bazar chino próximo. El Ayuntamiento ha apuntado que dos menores más se tuvieron que refugiar en la biblioteca Maestra Maria Antònia.

Mientras tanto, otro grupo de media docena de personas (según testigos, simpatizantes de la extrema derecha), asaltaron el centro de menores, rompieron los vidrios de la puerta de acceso y de las ventanas, y malograron mobiliario del interior. Los residentes se tuvieron que refugiar en las habitaciones hasta la llegada de la policía.

El consistorio también ha "lamentado y condenado los hechos violentos", que tuvieron lugar " con posterioridad a la legítima concentración". El Ayuntamiento ha mostrado "su preocupación por la gravedad de los hechos sucedidos" y ha hecho "un llamamiento a la tranquilidad". "Para evitar más disturbios, se ha reforzado el servicio de Policía Local y Mossos d'Esquadra. La violencia y la xenofobia no se pueden tolerar y nunca, nunca, son el camino ni la solución", ha añadido la nota.