La portavoz del Govern, Meritxell Budó, no ha concretado cuáles serán las próximas medidas que adoptarán para frenar los contagios de coronavirus y ha pedido esperar a que el Procicat evalúe la situación, aunque ha advertido de que difícilmente serán "medidas de relajación" a tenor de las últimas cifras.

"Tenemos sobre la mesa todas las medidas que puedan tomarse. Probablemente, viendo como evolucionan los datos, no serán medidas de relajación", ha subrayado en rueda de prensa posterior al Consell Executiu.

Así, ha dejado claro que no han descartado ninguna medida, y que sólo las explicarán cuando el Procicat las revise y sean "claras" para evitar especulaciones y no generar confusión.

Por ello, ha evitado en todo momento pronunciarse sobre la posibilidad de que haya un confinamiento domiciliario de fines de semana, de 15 días, o perimetral, y tampoco sobre qué pasará con sectores como el de bar y restaurantes así como con las universidades.

Según Budó, se actuará en función de la evolución de los datos epidemiológicos y siempre en base a lo que recomienden los expertos y las autoridades sanitarias, y esta semana habrá que valorar si se renuevan medidas dictadas o se suman otras.

"Se están revisando las medidas, y esta semana se tomarán decisiones en el ámbito del Procicat", ha recalcado la también consellera de Presidencia.

Después de que la Generalitat insistiera en pedir al Gobierno un permiso retribuido para los padres que deben quedarse en casa para cuidar un hijo aunque no sea positivo, Budó ha lamentado no tener respuesta alguna por parte del Estado.

"Esto no está resuelto, y esto depende del Gobierno. Pedimos que cumpla con su responsabilidad y dé respuesta a estas familias", ha subrayado la portavoz del Govern, destacando que podrían hacerlo ellos mismos si les transfieren los fondos para poderlo afrontar.

"Los recursos de la Generalitat no son infinitos. El Gobierno no puede lavarse las manos", ha advertido Budó, tras reclamar al Ejecutivo central que los decretos de estado de alarma vengan acompañados de medidas y fondos compensatorios.

ESTADO DE ALARMA

En su opinión, el último decreto de estado de alarma promulgado por el Gobierno, y que deberá votarse en el Congreso, no es "descentralizado" ni da las herramientas necesarias a las comunidades para tomar las medidas que consideren oportunas.

"Nos da alguna competencia, pero no toda la cobertura jurídica necesaria para ejecutar las decisiones y medidas que decidamos que tenemos que aplicar", ha lamentado Budó, tras poner como ejemplo que necesitarían la autorización del Gobierno si quisieran actuar para restringir la movilidad.