La Casa Batlló ha presentado una denuncia contra el sindicato SUT, que inició una huelga indefinida el 8 de octubre, por causar "destrozos irreparables" al edificio durante sus protestas, y cuantifica en 92.313 euros los daños y perjuicios a los trabajadores, clientes y la obra.

La denuncia, presentada el 13 de noviembre ante el Juzgado en funciones de guardia de Barcelona, se dirige contra uno de los miembros del sindicato dado que "algunos huelguistas provocaron destrozos irreparables en el Patrimonio Mundial, agresiones a empleados de Casa Batlló y amenazas a sus visitantes".

El sindicato SUT representa a trabajadores de Staffpremium, una de las empresas externas que presta servicios en la Casa Batlló, y que comenzó una huelga indefinida el 8 de octubre por la que la dirección cerró el centro el 29 de octubre "debido a la escalada de tensión provocada por los trabajadores en huelga de la empresa Staffpremium y los militantes y simpatizantes del sindicato SUT que la convocaron".

Al anunciar el cierre, Casa Batlló dijo que lo hacía por los destrozos que supuestamente cometieron los huelguistas en las vidrieras de la fachada y otros elementos del edificio, y la dirección afirmó haber sufrido "amenazas, difamaciones, agresiones y constantes agravios contra la plantilla, contra visitantes y contra el patrimonio mundial".

Este jueves, la casa ha asegurado que "los trabajadores de Casa Batlló que vivieron agresiones siguen en tratamiento médico" y ha lamentado que desde su construcción en 1906 nadie había dañado intencionadamente el edificio.