El teniente de alcalde de Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, Albert Batlle, ha explicado que los cuerpos policiales aumentarán "su función sancionadora" durante el toque de queda por el Covid-19.
Batlle ha negado que durante la primera noche los agentes vayan a realizar una función más informativa que sancionadora porque "la gente ya debe estar perfectamente informada" y nadie puede alegar que desconoce la situación.
El objetivo --ha destacado-- es que la gente cumpla las medidas de contención, y ha criticado: "No puede ser que noche tras noche haya que sacar a centenares de personas de los espacios públicos".
3.000 DISPERSADOS
Este fin de semana se ha dispersado a más de 3.000 personas en Barcelona por incumplir las medidas sanitarias, y se han gestionado unas 100 denuncias; Batlle ha advertido de que "se incrementarán esta noche si no se cumplen las restricciones".
Ha apelado a la responsabilidad, ha destacado que se ampliará la dotación de agentes el próximo mes de enero y ha advertido sobre la dureza de las medidas: "La Guardia Urbana ya está en otro estadio".