Una plataforma público-privada impulsada en Barcelona prevé crear 40.000 puestos de trabajo en los próximos diez años. La Barcelona Innovation Coast (BIC) es un proyecto que lidera el Ayuntamiento con la colaboración de las instituciones de la ciudad, universidades, centros de investigación, asociaciones empresariales, emprendedores y financieros. La iniciativa pretende potenciar la innovación concentrada en el eje de la costa de Barcelona para contribuir a diversificar la economía de la ciudad y generar puestos de trabajo de calidad. La BIC promoverá la innovación en cuatro sectores estratégicos: movilidad, energía, salud y, como vector transversal, digitalización. El consistorio quiere poner la innovación en el centro de la estrategia de recuperación de la ciudad.

La Barcelona Innovation Coast se ha presentado este jueves en el marco de las jornadas 'Barcelona reAct'. El consistorio ve el proyecto como una oportunidad para consolidar Barcelona como la capital de la innovación del sur de Europa y el mecanismo para movilizar recursos orientados a construir un modelo de desarrollo económico local competitivo y sostenible.

En la crisis sanitaria, social y económica por la pandemia del coronavirus, Barcelona quiere apostar para replantear el modelo económico y poner la innovación en el centro, con actuaciones concretas susceptibles de ser destinatarias de los fondos europeos Next Generation que se asignen en España.

La BIC quiere impulsar un espacio innovador que ocupa un 25% de la superficie de Barcelona: 25.100 hectáreas del litoral de la ciudad -delimitadas por la Gran Vía, el Morrot y las Tres Chimeneas de San Adrià del Besòs-. En este espacio se concentran 5 universidades; 28 centros de investigación; grandes empresas de los sectores TIC y otros sectores estratégicos y centros de gestión municipal vinculados a la innovación.

El Ayuntamiento calcula que la capacidad de impacto de la BIC en los próximos diez años será de hasta 40.000 puestos de trabajo directos nuevos. Este cálculo, indica el consistorio, tiene en cuenta los 550.000m2 de locales y oficinas de más de 1.000 m² que hay disponibles y que tienen potencial para hacer aterrizar empresas y proyectos innovadores. De estos 40.000 lugares que potencialmente se pueden lograr, 750 estarían vinculados a la Y+D. Se prevé que este proyecto tenga un impacto de 235 millones de euros (MEUR) para Barcelona.

Los sectores prioritarios en que se quiere impulsar la innovación son los que pueden tener más retorno para un modelo de ciudad más saludable, menos contaminada, más humana, como marca la Agenda 2030.