El Ayuntamiento de Barcelona, en el marco del Consorci de l'Habitatge de Barcelona, ha abierto una nueva convocatoria de ayudas de 20,5 millones de euros para la rehabilitación de vivienda, que será para este 2020 y que estarán enfocadas a la eficiencia energética y a la reactivación económica.

Lo han explicado la concejal de Vivienda, Lucia Martín, y el concejal de Emergencia Climática, Eloi Badia, en una rueda de prensa este jueves junto al presidente del Gremi de Constructora d'Obres, Josep Gassiot.

Estas ayudas incluyen diferentes líneas con las que se pretende llegar a 6.573 pisos y a más 16.000 personas, y entre las que se encuentra la mejora de elementos comunes y el interior de viviendas, la rehabilitación de edificios con comunidades vulnerables y territorios específicos.

En concreto, se destinarán 6,3 millones a la mejora de elementos comunes con eficiencia energética; tres millones en ayudas de hasta 4.000 euros para mejorar el interior de viviendas (prevén llegar a unos 750 pisos), y 6,2 millones a la intervención en fincas de alta complejidad.

También invertirán 2,5 millones en la captación y rehabilitación de pisos para la Bolsa de alquiler (prevén actuar en unos 750 pisos), y 2,5 millones a la regeneración urbana en el barrio de Canyelles y en el sur oeste del Besòs.

La convocatoria de ayudas a la rehabilitación generará alrededor de 4.600 puestos de trabajo y una inversión total de 82 millones, que se suman a los 8.400 puestos de trabajo que se generan a través de la promoción de obra nueva de vivienda pública de alquiler.

Martín ha asegurado que la cifra de las ayudas es similar a la del año anterior y la ha puesto en valor porque "la situación presupuestaria no tiene nada que ver" con la de 2019, por lo que cree que demuestra que el Ayuntamiento mantiene la rehabilitación de vivienda como una prioridad política de primer orden.

Badia ha alertado de que el sector que más emisiones produce en la ciudad es el de la construcción (un 41%) y que el sector doméstico representa el 20% de las emisiones en Barcelona: "Continúa siendo una piedra en la lucha contra el cambio climático", ha dicho.

A su vez, ha señalado que la ciudad tiene "un parque residencial envejecido que no coincide con los criterios de eficiencia energética" y ve necesario hacer un cambio en la cultura para concienciar de la emergencia climática.

Preguntado por el estado de las obras en la ciudad, Gassiot ha explicado que la paralización de éstas en el inicio de la pandemia supuso un "golpe duro" para la actividad constructora, pero que las obras se han podido retomar y que se están terminando las que estaban iniciadas.

Aun así, ha afirmado que están preocupados por la actividad del primer y segundo trimestre de 2021, ya que algunos promotores han decidido parar la continuación de las obras: "La actividad y ocupación en el primer semestre de 2021 no es clara", ha admitido.