El candidato de ERC a la presidencia de la Generalitat, Pere Aragonès, ha iniciado este jueves su discurso de investidura prometiendo abrir "una nueva etapa" en Cataluña e "impulsar una nueva Generalitat republicana".

Así ha comenzado Aragonès su discurso en la primera sesión de su investidura, que culminará mañana viernes con una votación en la que ya tiene asegurada la mayoría absoluta para ser investido president, con los 33 votos de ERC, los 32 de JxCat y los 9 de la CUP.

Aragonès ha planteado como reto de su mandato "hacer posible culminar la independencia de Cataluña, hacer inevitable la amnistía y el ejercicio del derecho a la autodeterminación" y gobernar "para el país entero".

Quiere impulsar una Generalitat "inconformista", "renovadora", "imaginativa" y "creativa", que haga "más fácil, amable y feliz la vida de todos y cada uno" de los ciudadanos de Cataluña.

"Cataluña necesita una sacudida", ha proclamado el hasta hoy vicepresidente del Govern en funciones, que se convertirá en el primer presidente de la Generalitat de ERC investido desde los tiempos de la Segunda República.

Aragonès ha llegado al Palacio del Parlament sobre las 15.40, acompañado de su mujer, y se ha acercado a conversar con un grupo de bomberos que se manifestaban en la entrada.

Han acudido a la sesión de investidura como invitados el expresidente de la Generalitat José Montilla, así como el expresidente del Parlament Joan Rigol.

Siguiendo la sesión desde el Parlament también está la diputada de JxCat Elsa Artadi, que luce una mascarilla negra con el logotipo del Ayuntamiento de Barcelona, en un guiño a su decisión de no formar parte del nuevo Govern y permanecer como líder municipal de su partido en el consistorio barcelonés.