El Espanyol trabaja en doble sesión desde este martes en la Ciudad Deportiva Dani Jarque, un paso más en la puesta a punto para el regreso de la competición liguera. El colista de la Liga tiene el firme objetivo de luchas por la salvación en los 11 partidos que quedan por disputarse una vez regrese el fútbol, si lo permite el coronavirus.

Este jueves, el equipo ha empezado a las 9.15, trabajando por grupos y en distintas franjas horarias. El cuerpo técnico encabezado por Abelardo Fernández, debe trabajar con mascarilla y guantes y manteniendo la distancia de seguridad. Estos días se da protagonismo al balón y se trabaja los centros de banda y los remates a portería. Todos los ejercicios se realizan siguiendo los estrictos protocolos marcados por las autoridades sanitarias debido al coronavirus. El equipo se divide en grupos de un máximo de diez futbolistas. El protocolo de La Liga quiere evitar los contagios y extrema las precauciones.

No es fácil trabajar en estas condiciones y con las altas temperaturas que se viven esta semana en Barcelona. Será una buena prueba de fuego para los jugadores que podrían soportar peores condiciones climáticas en el regreso del fútbol en el mes de junio.

La prioridad del cuerpo técnico blanquiazul es minimizar el riesgo de lesiones. Los entrenadores del Espanyol consideran que antes de regresar a la competición será necesario un trabajo previo de unas seis semanas como mínimo.

El equipo trabaja además con el hándicap de que ocho de sus jugadores resultaron infectados por coronavirus y han tenido que reponerse también físicamente.

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— RCD Espanyol de Barcelona (#PericosDesdeCasa ����) (@RCDEspanyol) May 21, 2020

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