La Junta de Castilla y León aprobará este jueves durante la reunión del Consejo de Gobierno el techo de gasto, que el presidente, Alfonso Fernández Mañueco, ha situado en el entorno de los 11.000 millones de euros.

Durante el trancurso de la sesión de control al Gobierno, Fernández Mañueco ha anunciado también que, ante las "complicadas" previsiones económicas que incluyen una "caída" de los ingresos en las arcas de la Comunidad, su Ejecutivo recurrirá al endeudamiento. Concretamente, en un 1,1 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB). "Es la mejor forma de proteger a las personas, a las familias y a las empresas", ha defendido ante el Parlamento autonómico. Pero también de "proteger" y "garantizar" la prestación de los servicios públicos, tales como la Sanidad o la Educación.

Tras la irrupción del COVID-19, la Junta se ha propuesto "fortalecer" los mecanismos de protección a los colectivos más vulnerables y "favorecer" la recuperación y el crecimiento de los sectores que considera "estratégicos". "Y lo vamos a hacer sin subir los impuestos", ha resaltado Fernández Mañueco.

Mano tendida

La Junta de Castilla y León mantiene su propósito de alcanzar un pacto para los Presupuestos de 2021. También de alcanzar una posición de Comunidad, que tratará de consensuar el propio presidente con todos los partidos con representación en las Cortes, de cara a la próxima Conferencia de Presidentes en la que se debatirá sobre el destino de los fondos europeos.

El portavoz del Grupo Parlamento Socialista y secretario general del PSOE de Castilla y León, Luis Tudanca, ha respondido a la mano tendida arremetiendo contra el presidente de la Junta, a quien acusa de no inmutarse ante las carencias, entre otras, de la gestión sanitaria de su Gobierno. "Hoy no tenemos presidente", le ha espetado Tudanca. Ante tal afirmación, Fernández Mañueco le ha invitado a abandonar "la política de bastonazos".