Las últimas horas dejan en Valladolid 635 positivos y ocho fallecidos por coronavirus. Una de las zonas básicas de salud que más preocupa en la capital por su incidencia es Rondilla I donde el índice de contagios por cada 100.000 habitantes es de 1.300. “La tendencia ha crecido en los últimos siete días, respecto a la semana anterior” explica el delegado territorial de la Junta en Valladolid, Augusto Cobos, quien ha indica que aunque estemos en un contexto de contagio comunitario, se evidencia un elevado porcentaje de infecciones en el ámbito familiar.

En Valladolid hay 219 brotes activos con más de 1.600 casos vinculados, entre ellos, el brote declarado en las últimas horas en el convento de clausura de las monjas clarisas del Sagrado Corazón de Cigales. Se desconoce el origen del brote que deja una hermana fallecida y más de una treintena de positivos. Hay tres hospitalizadas.

Hay que decir que la zona básica de salud a la que pertenece Cigales está afectado por un aumento de los contagios si tenemos en cuenta este brote. Cobos explica que esos 30 positivos no tienen contacto con el exterior, por tanto “no hay posibilidad de que el brote se extienda, otra cuestión es saber cómo se ha originado”.

La abadesa, Josefa Casais, ha indicado que intentan seguir con su día a día, pero se sienten bien, la mayoría son asintomáticas y están aisladas en sus habitaciones. “Estamos bien, nos sentimos bien atendidas y muy agradecidas”, comenta brevemente.

En la provincia, preocupa Medina del Campo Rural. La localidad contuvo la infección del coronavirus hasta el mes de septiembre, entonces los contagios se dispararon y Sanidad tuvo adoptar medidas restrictivas para este municipio que hoy ve cómo se han reducido los contagios, pero sin relajación. El alcalde, Guzmán Gómez, explica a COPE que la sensación es “muy mala”, tenemos qe seguir “en alerta máxima” para que desciendan los contagios y se pueda volver a esa “cierta nueva normalidad”.