La parroquia de Santa Eulalia de la capital pide colaboración para costear los 90.000 euros que le faltan para cubrir la obra de reparación de las humedades en torno a la portada del templo que se abre a la calle de La Plata. Una intervención con un presupuesto de 300.000 euros, de los que la parroquia ha podido afrontar 210.000. Por eso, se efectúa un llamamiento a fieles particulares, administraciones públicas, colectivos, fundaciones o cualquier institución que pueda contribuir a este fin, como ha explicado Mariano Sanz, colaborador de la parroquia y vicario judicial diocesano.

Entre 2006 y 2009, un proyecto para abrir la portada románica de ese punto y convertir los espacios y semisótano anejos en despachos, salas de reunión y otros usos, que incluyó la construcción de una terraza y unas escaleras. Punto en el que confluían todas las aguas de las cubiertas, llegando a entrar en la iglesia, ocasionado daños y suponiendo riesgo para el edificio, las personas y el patrimonio del templo. Incluso existía una bomba en el interior para reconducir esas aguas al sistema de alcantarillado público. En 2013, la diócesis encargó un informe sobre los problemas ocasionados, reclamando, a través de la Junta de Castilla y León, a la dirección facultativa de las obras una subsanación. Una reclamación que no tuvo fruto.

Pero dados los perjuicios y el riesgo se elaboró un nuevo proyecto, que es con el que ahora se van a resolver los problemas y para el que se pide colaboración. El párroco de Santa Eulalia, don Julio Alonso, sostiene que los fieles deben cambiar su mentalidad, para permitir que las parroquias alcancen la autosuficiencia económica. Se espera una reunión con la Junta de Castilla y León, para sondear las vías en que la Administración regional se pueda implicar en la financiación, aunque aparece el escollo de que la iglesia de Santa Eulalia no es Bien de Interés Cultural.

Sanz ha hecho hincapié en que las obras no redundarán únicamente en la mejor protección del patrimonio histórico-artístico, sino que pueden ofrecer una posibilidad al ámbito social, al presentar unos espacios que pueden ser usados por colectivos o asociaciones, entre otros. Igualmente, ha recordado que el templo del siglo XII presentaba originariamente tres naves, dos atrios y un cementerio. Este último y el atrio contiguo fue derribado, en aras de que el espacio público ganase y la plaza de Santa Eulalia tuviera un tamaño mayor. Por eso, apela al mismo espíritu colaborativo del estamento público ahora.

Por otro lado, ha querido desmentir la idea generalizada de que la Iglesia cuenta con amplios recursos económicos. Según los datos que ha compartido, la diócesis de Segovia mantiene un presupuesto anual de unos seis millones de euros, mientras que, ha puntualiado, el Ayuntamiento de la capital segoviana maneja unos 68 millones y la Diputación Provincial, unos 76.

Las obras ya han ejecutado las cubiertas de la parte afectada y se ha realizado la estructura fundamental. Queda el acabado interior, con detalles como la pintura y otros. El proyecto incluye la apertura de una zanja de drenaje que conecte la calle José Zorrilla con el cauce del Clamores, que discurre bajo la cabecera de la iglesia de Santa Eulalia. Los cálculos es que toda la actuación pueda estar culminada en uno o dos meses.