A mediados de noviembre se podrá ya tratar con radioterapia a pacientes en el hospital Recoletas. Podría ser la semana del 10 o del 17 de ese undécimo mes del año. Ese es el cálculo de la Junta de Castilla y León. Las obras para la unidad están prácticamente acabadas y puede que esta semana se culminen también los exámenes del Consejo de Seguridad Nuclear. A partir de ahí, llegarán los ensayos radiofísicos, antes de que se pueda empezar a tratar ya a personas, como ha explicado en COPE el delegado territorial de la Junta, José Mazarías.
Y en el ámbito sanitario, la provincia se ha colocado como la peor de Castilla y León tanto en incidencia acumulada a siete días como a catorce. La razón principal son los brotes de positivos entre los trabajadores temporeros de la campaña de la fresa. Son siete actualmente esos brotes, con 82 casos positivos confirmados y 127 casos en estudio por contacto estrecho. Una situación que se estabiliza, salvo en un municipio, donde aún presenta incrementos, como ha reconocido el delegado territorial del Gobierno autonómico.
Esa campaña finalizará este mes y ha traído a la provincia a más de 1.500 personas. A todas ellas se les ofrece la posibilidad da vacunarse frente al coronavirus, aunque solo se ha logrado con aproximadamente un tercio de ellos. Mazarías ha lamentado las dificultades para convencer a estas personas, a pesar de que se les brindan todas las facilidades. Incluso ha puesto el ejemplo de todo un dispositivo organizado en Cuéllar, para inmunizar a más de 200 personas. Tras tener todo dispuesto, solo una persona acudió a recibir la inoculación.
En el Hospital General se mantienen cinco pacientes con Covid-19 ingresados en planta, de los que tres son temporeros. Afortunadamente, la UCI no presenta enfermos de ese tipo.