Los veterinarios segovianos muestran su decepción con el Gobierno, por no haber contado con su colectivo a la hora de afrontar la pandemia del coronavirus. Recuerdan que, al igual que en ébola, la gripe aviar o la crisis de las vacas locas, este mal puede tener origen animal y que su dominio de la epidemiología es total. Asimismo, disponen de laboratorios en los que se podían haber efectuado análisis críticos. Un malestar que ha expresado en COPE el presidente del Colegio Oficial de Veterinarios de Segovia, José Miguel Gil.

Por otro lado, ha reiterado que las mascotas no afrontan riesgo alguno, puesto que no hay prueba de contagio del coronavirus de animales domésticosa humanos ni viceversa. Los veterinarios han seguido manteniendo su labor respecto a esas mascotas, al igual que en el control animal.

José Miguel Gil ha explicado que se han continuado las visitas a explotaciones y el trabajo en unidades veterinarias, tanto las pertenecientes a la Administración como las que trabajan libremente. En cuanto al ámbito de la tauromaquia, ha recordado la legislación vigente en Castilla y León. En cuanto a los festejos a puerta cerrada y las labores ganaderas, ha confirmado que necesitan la participación de un veterinario.

Los veterinarios han tenido mucho trabajo en los últimos meses. Un trabajo en la sombra por culpa del Gobierno, según José Miguel Gil, que ha incidido en que, de no ser por su colectivo, el suministro alimentario no habría estado garantizado para la sociedad.