Hoy los funcionarios de prisiones del Centro Penitenciario de “La moraleja” en el término municipal de Dueñas se han concentrado a las puertas de la instalación durante 30 minutos.  El parón obedece a una muestra de solidaridad con un compañero de otro centro, concretamente de Soto del Real en Madrid, que sufrió ayer un brutal ataque por parte de un interno.

Este recluso como contábamos ayer, fingió un desvanecimiento mientras realizaba una llamada telefónica. Este funcionario fue de inmediato a auxiliar al interno, momento que el preso aprovechó para levantarse inmediatamente y propinarle con un objeto punzante hasta tres puñaladas.

Mientras estos funcionarios protestaban contra la falta de medios en los centros, causa principal, ajuicio de estos trabajadores, de que en los últimos 6 años se hayan producido mas de 2600 agresiones, un furgón especial llegaba a la prisión.

Transportaba hasta Palencia a este interno, en un desplazamiento de urgencia que los representantes sindicalistas del Dueñas no terminan de comprender. Admiten que hay espacio para alojarlo, pero argumentan que ya tiene otros dos presos en el módulo calificados como como peligrosos, y que no hay personal suficiente para controlarlos a todos. “Tenemos 2 reclusos en régimen F. I. E. S. 1 control directo (siglas de Fichero de Internos de Especial Seguimiento) a los que hay que sumar este tercero con lo que el módulo de aislamiento le tenemos prácticamente colapsado”.

No sólo se quejan por la falta de medios humanos sin también de materiales. “Hace unos días se pinchó un compañero con una maquina tatuar casera mientras realizaba un cacheo. Hace años que pedimos unos guantes adecuado para realizar estos registros, y no unos guantes de jardinería”. Ahora ese trabajador tendrá que en los próximos meses someterse a una batería de pruebas para descartar enfermedades, ya que se ha activado el protocolo de riesgo biológico.