Endesa ha donado 87 equipos informáticos, dotados de tarjeta de datos, a centros educativos del Bierzo con posibilidad de préstamo, en caso necesario, a alumnos en situación de vulnerabilidad. Esta iniciativa se inscribe en el plan de responsabilidad pública puesto en marcha por la compañía ante la pandemia del coronavirus.

Merced a una inversión de 2 millones de euros, Endesa está donando en las comunidades donde opera ordenadores, con sus correspondientes tarjetas de conexión a internet, a los centros con posibilidad de préstamo a alumnos en situación de vulnerabilidad en caso de ser necesario. De este modo Endesa quiere minimizar el riesgo que la brecha digital supone para algunos jóvenes que no pueden acceder a la teleformación que realizan los colegios.

Los alumnos que se beneficiarán de esta iniciativa cursan estudios en 27 centros del Bierzo. Una representación de los directores de estos colegios ha acudido hoy a las instalaciones de la UPH Noroeste, en Ponferrada, donde el director de la Unidad de Producción Hidráulica (UPH) Noroeste, José Antonio Galván, ha hecho entrega de los equipos al director provincial de Educación, Francisco Javier Álvarez Peón.

Esta iniciativa cuenta con el respaldo de la Consejería de Educación, de la Junta de Castilla y León. En un convenio firmado recientemente entre este organismo y la compañía se establece también que Endesa se encargará durante los próximos meses del pago de la conexión a internet de los ordenadores entregados.

José Antonio Galván ha declarado que, “además de poner de manifiesto nuestra especial relación con el Bierzo, este proyecto consigue materializar el propósito que la compañía se fijó con el inicio de la pandemia de ayudar con su Plan de Responsabilidad Pública allí donde más se nos necesitara y como más se nos necesite”. “Tras la compra de material sanitario y bienes de primera necesidad, se requiere ahora la reactivación socioeconómica de todo el país y asegurar, como siempre hemos dicho, que nadie se quede atrás en esta transición que vivimos”, ha recalcado el director de la UPH Noroeste.

Endesa desarrolla actualmente la segunda fase de su plan de responsabilidad pública, que está dotada de 13 millones de euros, que se unen a los 12 millones que la compañía aportó el pasado marzo en la primera etapa de su plan. Aquella inversión inicial se destinó fundamentalmente a la compra de material sanitario para apoyar a las entidades que estaban luchando de forma directa contra la Covid. En Castilla y León Endesa donó decenas de miles de mascarillas que se emplearon para profesionales de servicios sociosanitarios, además de población vulnerable, y equipos para la realización de test de detección de la enfermedad.

La segunda fase del plan de responsabilidad pública de Endesa tiene como objetivo hacer frente a la brecha digital que la pandemia ha puesto en evidencia. En este sentido, la compañía ha diseñado un programa de ayudas que se sostiene sobre dos ejes bien definidos: las familias y la activación económica.