El alcalde de Ponferrada, Olegario Ramón, y la concejala de Infraestructuras, Carmen Doel, han asistido este miércoles a la apertura de las calles afectadas por la primera fase de Plan de Accesibilidad en el barrio del Temple de la capital berciana.

Los trabajos de la primera fase se extendieron por las calles Nicomedes Martín Mateos, Verardo García Rey, Comandante Zorita, Hierro y Carbón del barrio del Temple en las que se actuó sobre un total de 6.500 metros cuadrados. Los principales trabajos consistieron en la creación de una “cota cero para peatones” con la eliminación de bordillos, la colocación de un suelo antideslizante y el traslado del mobiliario urbano fuera de las áreas de paso, para no entorpecer el paso de los peatones. Además, las obras también supusieron la sustitución de las redes de saneamiento y abastecimiento, así como sus correspondientes acometidas domiciliarias. En total, los operarios eliminaron 1.350 metros de tubería de fibrocemento, que se sustituyó por polietileno. Las actuaciones contaban con un presupuesto inicial de 604.000 euros, aunque finalmente se adjudicaron por 440.000.

Pedro González de la Asociación de personas con discapacidad física del Bierzo (Ambi), valoró las obras como “un claro ejemplo del camino a seguir” y destacó el trabajo llevado a cabo por el Observatorio Municipal de la Discapacidad a la hora de elaborar el Plan de Accesibilidad.

Además, el alcalde ha anunció que el Ayuntamiento destinará 600.000 euros a la segunda fase de obras del Plan de Accesibilidad también en el barrio del Temple.

De cara a esta segunda fase, ya aprobada, se completarán las actuaciones en las calles Comandante Zorita, Hierro y Carbón y se dará inicio a los trabajos en las calles Conde de los Gaitanes y José Valgoma Suárez y tendrá un presupuesto de 600.000 euros. Reseñar que el proyecto se encuentra en fase de valoración, después de que las empresas interesadas hayan presentado sus ofertas a la licitación.

LAS CARBONERAS DE LA MSP

Por otro lado, el alcalde también apeló a una “solución consensuada” respecto a las antiguas carboneras del poblado de la Minero Siderúrgica de Ponferrada (MSP), unos inmuebles de valor histórico y patrimonial situados en el mismo barrio, sobre los que se está consultando a los vecinos “uno por uno”. Entre las posibilidades de cara al futuro, Ramón habló de mantenerlas y restaurarlas, de eliminarlas para llevar a cabo una actuación urbanística o de mezclar ambas posibilidades y dejar algunas carboneras en pie “para que se sepa lo que hubo aquí”. En cualquier caso, la futura actuación no contará con consignación presupuestaria en este ejercicio 2020.