La Guardia Civil ha desarticulado en la comarca burgalesa de la Ribera del Duero una banda cuyos integrantes, tres varones de entre 28 y los 42 años, han sido detenidos como presuntos autores de una treintena de robos con fuerza en el interior de viviendas aprovechando el estado de alarma y el confinamiento.

El instituto armado ha informado, a través de una nota de prensa, de que entre los meses de marzo y mayo pasados, con el estado de alarma en vigor motivado por la crisis sanitaria del covid-19 y el periodo de confinamiento decretado se detectó un incremento de robos en el interior de viviendas, normalmente segundas residencias deshabitadas y unifamiliares, en pequeñas localidades del sur de Burgos.

En ellos se observó un mismo proceder, con el empleo de la fuerza como norma para acceder a los inmuebles, mediante forzamiento de ventanas y puertas.

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En todos los casos ha llamado la atención el gran desorden existente en las distintas estancias, supuestamente ocasionado al remover muebles, cajones y armarios en busca de objetos de valor, joyas y dinero.

La línea de investigación emprendida, en el marco de la operación Ribercruz, se vio impulsada con el aporte de información gracias a la colaboración ciudadana, al conocerse la presencia sospechosa de un vehículo en las proximidades de uno de los municipios donde se cometieron los robos.

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El resultado de las inspecciones realizadas ha permitido la identificación y detención de tres personas, cuyos datos de filiación corresponden a las iniciales A.E.B., J.E.A. y R.A., y el registro de dos domicilios bajo mandamiento judicial.

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En uno de ellos los agentes han encontrado y recuperado efectos cuyo origen y propiedad no pudieron demostrar, y que posteriormente han sido reconocidos por sus legítimos propietarios al haber sido sustraídos de las viviendas asaltadas.

La Operación Ribercruz ha permitido no solo la total desarticulación de este grupo, "muy activo y escurridizo", que incumplió sistemáticamente el confinamiento decretado durante el estado de alarma y que había establecido su base en la zona sur de la provincia burgalesa, sino el esclarecimiento de cinco robos con fuerza cometidos en 2019 y otros 25 en el primer semestre de 2020.