Parecía que los robos en explotaciones agrarias habían descendido, de hecho no veníamos recibiendo en los partes policiales reseñas de este tipo de atracos, pero la finalización del toque de queda, y la apertura de zonas anteriormente confinadas, ha vuelto a permitir que organizaciones dedicadas al robo en el campo hayan vuelto a su actividad.

En la noche del 27 al 28 los equipos eléctricos de riego, con sus transformadores desaparecían dejando sin suministro eléctrico a los sistemas de riego, y con pérdidas que se calculan en los 70.000.

Miguel Jara afectado por el robo se siente impotente

Miguel Jara, agricultor y socio afectado se siente impotente y quiere que se sepa que la actividad delictiva continúa sin que nadie la frene o ponga solución. Es consciente de que los efectivos de Guardia Civil son insuficientes, y nos cuenta el desamparo que tienen los agricultores,(Entrevista)

El presidente de ASAJA ,Jorge Navarro, sabe lo que se siente, por que lo vivió en primera persona y recuerda que entre los años 2012 y 2013 los robos se intensificaron y se pusieron en marcha las “patrullas roca”, que fueron un disuasivo para estas bandas organizadas autoras de atracos a transformadores y sistemas de riego, provocando grandes daños en el campo.

Impotencia, desesperación siente cuando habla de la situación que tienen agricultores y ganaderos, a los que no solo los amigos de lo ajeno atacan. Los bajos precios de los productos, y la importación de ajo de China y Argentina, o la cebolla de Nueva Zelanda, le hacen pensar en el desamparo en el que están, y se pregunta para que sirve la UE. Tampoco le extraña que los jóvenes no quieran dedicarse a la producción de alimentos, y busquen un futuro menos incierto que el que la agricultura les proporciona.

Jorge Navarro, Presidente de ASAJA