Santander ha celebrado este lunes la festividad de la Virgen del Mar en el 42 aniversario de su nombramiento como patrona de la ciudad, con un formato reducido.

El coronavirus ha obligado, a suspender la tradicional romería que se celebraba con la presencia de miles de personas durante todo el día en la campa que rodea la ermita, donde los ciudadanos comían y participaban en distintas actividades lúdicas. Se trata del segundo año que sucede porque el año pasado también fué una jornada marcada por las medidas sanitarias por el coronavirus y de recuerdo a las víctimas de la pandemia.

Al acto han asistido el presidente regional, Miguel Ángel Revilla, la alcaldesa, Gema Igual asi como miembros de la Corporación y la misa principal a las 12:00 ha sido presidida por el Obispo Manuel Sánchez Monge.

Tanto Revilla como Igual han mostrado su confianza que de el próximo año vuelva a llenarse de gente la campa de la ermita para la tradicional romería. "Yo creo que este va a ser el último año con restricciones, las vacunas nos van a marcar el rumbo y yo creo que el año siguiente será como siempre, una fiesta con participación pero hay que seguir con la tradición aunque sea de esta manera tan reducida, hay que venir como todos los años", ha asegurado el presidente.

Para la alcaldesa es " una pena, estar celebrando la Virgen del Mar solos y sin gente. Es una pena porque es nuestra patrona y porque es una fiesta que s vive de una manera muy especial en toda la zona de San Román y en toda la ciudad" pero ha asegurado que es lo que corresponde.

ACTOS MARCADOS POR EL COVID

A lo largo de la jornada se han celebrado varios oficios religiosos, protagonizados por la misa principal de las 12.00 horas, en la que Igual ha renovado el voto a la Virgen y ha recordado a los fallecidos por coronavirus y a las personas que se han visto golpeadas por la pandemia.

Además, ha tenido palabras de agradecimiento para los santanderinos, que ya el pasado año respetaron las restricciones y acudieron de forma minoritaria y escalonada a encontrarse con su patrona.

Todos los oficios religiosos previstos se han desarollado con con restricciones de aforo y señalización para garantizar el distanciamiento entre los asistentes.

Con esta celebración se cumple con un "antiquísimo" voto a cumplir por parte del Cabildo y el Ayuntamiento de la villa en el lunes siguiente a la Pascua de Pentecostés.

La imagen de la Virgen ha ejercido un influjo en Santander y a lo largo de la historia se ha recurrido a ella para que intercediera ante situaciones que asolaban la ciudad, como una epidemia de peste en 1597, una importante sequía en 1848 o en la actual pandemia de la covid-19.

La virgen del mar fue proclamada oficialmente en 1979 patrona de santander y se celebra siempre 51 dias despúes del Domingo de Resurección.