El proyecto “ La huella Olfativa del Cáncer ” que permite la detección de esta enfermedad a través del olfato de varios perros entrenados podría estar funcionando en " 6 meses" . La Fundación Biodogtor en colaboración con el servicio oncológico del hospital de Valdecilla son los impulsores de esta idea que esta en su fase final según sus responsables. Su fin médico es demostrar la eficacia de los perros en la detección del cáncer de pulmón y colon a partir de muestras de aire exhalada y recuerdan que estos animales ya se utilizan para otras labores de detección como drogas y su efectividad es altísima.

José Luis y Nuria son los dos entrenadores de los perros e impulsores de la fundación y han explicado en Cope el origen de la idea. “ Durante mucho tiempo las enfermedades se han asociado al olor y los veterinarios seguimos haciéndolo. Lo que funcionaba hace décadas puede seguir funcionando hoy. Por eso se nos ocuurrió que podriamos ponerlo en marcha para detectar el cáncer” asegura Nuria. “ El potencial olfativo del perro es 100.000 veces superior al nuestro.  Estamos en una fase de selección de perros, introduciremos el olor y en 6 meses tendremos resultados”.

Eso sí aclaran que la intervención de los perros  siempre estará coordinada por profesionales oncológicos. “ Siempre será un profesional médico el que valore la validez de la prueba y determine el diagnóstico final. De forma paralela al cribado convencional de cáncer se hará el nuestro para ver si los resultados son óptimos y se pueden integrar en el protocolo de detección de la enfermedad” puntualiza. "Nuestro objetivo es dar una herramienta más a los médicos y los pacientes".

Durante los últimos meses han entrenado a  140 perros de los que sólo van a poder elegir 5.Todos  pertenecen a familias que los han “ entregado para el entrenamiento de forma altruista y generosa”, aseguran.