espués de seis años peleando, los vecinos de la Turbera, en Torrelavega, van poner solución a las filtraciones de agua y de humedades que venían sufriendo, supuestamente, procedentes de la antigua mina de Reocin. Mónica García, la portavoz de los vecinos, ha explicado a Cope que los obreros ya están hoy trabajando para instalar una zanja que recoja y canalice el agua. Satisfacción por tanto, de los vecinos que consideran que es un buen proyecto, puesto en marcha por el Gobierno de Cantabria y el Ayuntamiento de Torrelavega, y cuya duración se prevé que sea de un mes.
Mónica García ha avanzado que a partir de ahora luchará por que los vecinos sean indemnizados por los desperfectos de las casas.