Un nuevo desprendimiento en la carretera TF-5, el cuarto en menos de un año aunque de menor intensidad, ha causado de nuevo importantes retenciones en el tramo de la vía entre Los Realejos y San Juan de la Rambla.

La caída de piedras se producía este miércoles a primera hora de la mañana cerca del barranco de Ruiz, afectando a la circulación sentido Santa Cruz. El vicepresidente del Cabildo de Tenerife y consejero de Carreteras, Enrique Arriaga, ha explicado que una de las piedras impactó sobre una guagua de TITSA que cubría la línea 106 entre Icod y Santa Cruz, aunque sin demasiada importancia, y que se estaba trabajando en el atestado para abrir la vía "lo antes posible".

El 1-1-2 Canarias ha informado que, a consecuencia de la caída de una piedra en uno de los cristales de la guagua, una mujer de 53 años ha sido atendidad por una crisis de ansiedad, siendo trasladada a un centro sanitario. El vehículo no ha sufrido mayores problemas y podrá reanudar su itinerario.

Las cuadrillas de Carreteras del Cabildo están limpiando la calzada para restablecer totalmente la circulación. Mientras, la Guardia Civil ha habilitado un paso intermitente en ambos sentidos por el carril hacia Icod de los Vinos.

Las colas se extienden sentido Santa Cruz desde el barrio de Santa Catalina, en La Guancha, y sentido Icod desde el final de la autopista.