La Comisión de Salud Pública ha acordado este martes ampliar la vacunación contra la covid-19 a niños entre los 5 y los 11 años y ha decidido que el intervalo de administración de la segunda dosis sea de ocho semanas, para contribuir a incrementar la respuesta inmune.

A instancias de la Ponencia de Vacunas, la Comisión, que reúne a técnicos del Ministerio de Sanidad y comunidades autónomas, ha optado por este intervalo de ocho semanas para tener vacunados a todos los menores de 5 a 11 años en un corto espacio de tiempo con al menos con una dosis.

La llegada de las vacunas pediátricas está prevista para el 13 de diciembre, a partir de ese día se repartirán de forma equitativa entre las comunidades autónomas de forma proporcional a su población diana. Y se ha acordado que la vacunación infantil comenzará a partir del 15 de diciembre.

La noticia, en general ha sido bien acogida desde los profesionales médicos. El portavoz de Sanidad del Partido Popular y neumólogo del Hospital Doctor Negrín de Gran Canaria Miguel Ángel Ponce ha destacado que “ el inicio de la vacunación en los niños va ayudar fundamentalmente a conseguir más la inmunización de la población en general,y a evitar que el virus pueda seguir moviéndose entre población no vacunada, y por tanto a generar nuevas variantes”.

Ponce tiene claro que “los estudios en niños se han realizado más tarde porque la prioridad eran los adultos”, pero insiste en destacar que “hay buenos resultados de seguridad y buenos resultados de nivel de inmunización en este sector de edad”.

No obstante, aclara,“no hay que perder de vista que la prioridad sigue siendo la población mayor y con morbilidad y además debe acelerarse la tercera dosis en la misma, que junto con la vacunación de los niños va a contribuir a frenar la generación de nuevas variantes”.