El Parlamento de Canarias hace de anfitrión esta semana de la Asamblea Plenaria de la Conferencia de Asambleas Legislativas Regionales de la Unión Europea (CALRE), la primera del mandato presidido por Gustavo Matos. La cita se desarrollará por videoconferencia y tendrá este viernes, 15 de enero, a partir de las 11 de la mañana. Previamente ha sido convocado el Comité Permanente, que se reune a las 16:00 horas del jueves para dar su aprobación definitiva de la sesión de trabajo del viernes.

La bienvenida a la asamblea correrá a cargo del también presidente del Parlamento de Canarias, Gustavo Matos, en el marco de una sesión de apertura en la que se prevén intervenciones de representantes institucionales del ámbito regional, nacional y europeo. A continuación, serán presentados los informes de actividad de los grupos de trabajo por sus coordinadores y se votarán los grupos y coordinadores para 2021. Para finalizar la asamblea se debatirá y votará la presidencia de CALRE de este año.

En una entrevista en COPE Canarias, Matos ha destacado la importancia de que los parlamentos regionales europeos se reúnan para poner en común su papel decisivo en la configuración democrática de los Estados. Para el presidente de CALRE, es una jornada "emocionante aunque con sabro agridulce", al no poder celebrarse presencialmente. En todo caso, ha afirmado que será "igual de eficiente".

El presidente del Parlamento canario ha destacado que las asambleas legislativas son fundamentales en las regiones europeas, especialmente, en aquellos Estados descentralizados con un amplio poder en sus regiones, como ocurre en España. Matos ha destacado que la pandemia del COVID-19 ha demostrado en nuestro país que la capacidad de decisión que tienen las comunidades autónomas y, en último lugar, los parlamentos de cada una de ella, donde se han tenido que convalidar muchos de los decretos de los gobiernos autonómicos.

En octubre de 2019, Gustavo Matos resultó elegido presidente de este órgano en el que se aglutinan 72 regiones de siete estados miembros de la Unión Europea desde que los se representa a 200 millones de ciudadanos y ciudadanas de la UE. En los últimos doce años, solo en cuatro ocasiones ha estado presidido este órgano por un parlamento español, destacando de este último mandato las especiales complicaciones derivadas de la pandemia de COVID-19 que afecta a todas las regiones.

En ese momento, los retos sobre los que se centraban los esfuerzos giraban en torno a la necesidad de potenciar el papel que juegan las asambleas y parlamentos regionales en el marco de las políticas de la Unión Europea, la búsqueda de soluciones a los desequilibrios territoriales, la desigualdad y el reto demográfico y, de manera especial, la importancia de abordar los desafíos de manera transversal e integral para aportar soluciones comunes.

Como consecuencia de ello, CALRE y el Comité de las Regiones iniciaron los trabajos de un proyecto piloto encaminado a que los parlamentos regionales europeos tengan una capacidad mayor de participación en la toma de decisiones de la Unión Europea. Sería una fórmula de actuación conjunta para que las opiniones y necesidades de las regiones sean tenidas en cuenta desde el primer momento.

“Sin embargo, un año 2020 insólito y excepcional,donde todas las previsiones y prioridades han debido ser reformuladas por imposición de la pandemia de COVID-19, no ha hecho sino consolidar la idea de que debemos regresar a los principios fundacionales de la Unión Europea para dar respuestas conjuntas a una nueva realidad que exige participación, caminar de la mano y, sobre todo, mucha palabra”, expresa Matos.

También la urgencia de afrontar el fenómeno migratorio desde una política común ha centrado el trabajo de CALRE en este 2020. En este sentido, Gustavo Matos trasladó recientemente al presidente del Comité de las Regiones, Apostolos Tzitzikostas, la necesidad de que en el futuro proyecto de la UE que se encuentra en debate se introduzca como “elemento ineludible” la obligación de afrontarlo de manera conjunta por la UE.