El prototipo de vacuna contra el SARS-CoV-2 desarrollada por un equipo del CSIC llegará más tarde que otras pero será de las mejores del mercado por varios motivos: se administrará en una sola dosis por vía intranasal y además de proteger contra la infección, evitará la transmisión del virus al resto de la población.

Esta revolucionaria vacuna será 'autoamplificable', lo que significa que la dosis de ARN que se inyecta podría multiplicarse hasta 5.000 veces dentro del organismo.

Además, aunque las agencias de seguridad de medicamentos prefieren la administración intramuscular, este prototipo apuesta por la ruta intranasal porque las mucosas son el lugar de entrada del virus al organismo, y con la inmunización de esa zona, la protección será mayor.

Aunque esta vacuna se va a comercializar mucho más tarde que otras, lo hará con todas las actualizaciones y estará preparada para afrontar las mutaciones de las variantes del SARS-CoV-2 de Reino Unido, Sudáfrica y Brasil, y seguramente de alguna variante de Estados Unidos.

La inmunóloga del Hospital Universitario de Canarias Ybelice Barrios ha reconocido en COPE que los profesionales sanitarios están ilusionados con este novedoso proyecto. "Todas las armas que se aporten en la lucha contra la pandemia serán bienvenidas, puesto que tendremos más herramientas para esta batalla a nivel global".

En este sentido, ha querido destacar que la vacuna intranasal del CSIC está obteniendo buenos resultados en las pruebas que se han llevado a cabo en laboratorio.

"Conseguir que la reacción inmune se haya focalizado en la puerta de entrada del cuerpo es una estrategia ambiciosa y está teniendo una respuesta positiva en los modelos experimentales. Será esterilizante y muy fácil de administrar, ya que se podrá aplicar con un simple espray. En cualquier caso, todavía habrá que hacerle ajustes en lo que se refiere a la dosis, pues funcionará con la ruta más directa, pero también con la más compleja por la situación de las vías respiratorias de cada individuo", ha relatado.

En la actualidad, el suero se está probando en ratones y hámsters y, si todo va bien, se ensayará en macacos. Si no hay problemas, la vacuna intranasal del CSIC estará lista en el primer semestre de 2022.