Miren, tal y como nos confirmaba ayer Lluis Serra Majem en este programa, el comité de expertos ha recomendado que las dos islas capitalinas mantengan el mismo nivel de restricciones, pasando Tenerife a fase dos. Y aunque al final esto dependerá de una decisión política que se anunciará en el día de mañana, en la práctica supone que de nuevo podrán abrirse los comedores interiores de los restaurantes, y que se restringirá el toque de queda entre otras medidas.

Pero la verdad es que la conversación con este prestigioso catedrático de medicina preventiva y salud publica nos dejó además una certera afirmación: “a veces lo que se percibe como un premio acaba siendo un castigo para la población” y la experiencia nos dice que siempre que se ha abierto la mano ha habido repuntes en Canarias”.

Dicho en otros términos, si Angel Víctor Torres aparece mañana y nos dice que de nuevo podemos pisar el comedor de un restaurante, o estar hasta más tarde en la calle, tampoco se trata de que vayamos todos en avalancha ahora como si no hubiera un mañana. Porque la prudencia, debe ser nuestra inseparable compañera de viaje en esta pandemia, y porque este cambio no va a significar que todo el monte es orégano.

Hemos tenido un gráfico ejemplo en los últimos días con lo de la nevada el Teide, y los respectivos cierres y aperturas al tráfico. La novelería de muchos, deja en evidencia la falta de responsabilidad de una parte de la población, que incluso sin informarse antes de si los accesos estaban abiertos o cerrados, prefiere poner por delante el postureo de sacarse una foto para el instagram a su propia salud.

Y así nos luce el pelo, amigos. No nos adelantemos, vamos a esperar que nos dice mañana el Gobierno de Canarias y nunca dejemos de lado el raciocinio y la prudencia, por mas que tengamos tantas ganas de socializar.