Hoy se cumplen 7 años de la vuelta del CD Tenerife a la que hoy es la Liga Smart Bank. Un hecho que se logró tras vencer en el Heliodoro (3-1) ante L’Hospitalet y aquella derrota en Barcelona (0-1) en el partido de vuelta. Todo ello de la mano de Álvaro Cervera, quien devolvió al club al futbol profesional solo dos años después de los dos descensos consecutivos que sufrió el equipo tinerfeño. Otro de los protagonistas es Luismi Loro, quien fue una pieza clave en la plantilla y logró el primer gol de la eliminatoria. El exjugador recordó en Deportes en COPE Tenerife cómo vivió el ascenso desde dentro.

En el partido de ida, tomo parecía bien encaminado ya que, desde el punto de vista de Luismi Loro, tres tantos de diferencia iban a ser “difíciles de remontar” y se veían ya prácticamente en Segunda División. Sin embargo, “el gol que nos marcaron en los últimos minutos les daba un poco de alas y sabíamos que era un equipo muy duro en su campo, que era de césped artificial y venían de una buena racha. Ahí tuvimos miedo de que se nos pudiera escapar”, expresó.

Por su parte, no dudó a la hora de convertir el tiro libre. “Aunque se acercó mucha gente para tirar la falta, dentro del vestuario siempre hay unos códigos y gente en la que confías más. Sí que es verdad que yo era un encargado de tirar las faltas, sobre todo desde la derecha, y ahí no había duda de que podía lanzarla”, explicó. Consiguió un gol que el exjugador comparó con el de sus inicios en el conjunto blanquiazul ante el Albacete, por su similitud. Asegura que siempre ha tenido la confianza de que puede marcar goles y era una posición que le gustaba. Gracias a eso se pudo abrir la eliminatoria y se quitaron un peso de encima. “Ese año creo que marqué cuatro o cinco goles de falta”, añadió.

Luismi Loro confesó que durante la concentración en tierras catalanas estaban muy nerviosos. “Recuerdo el día del partido en Barcelona. Había una fuerte tensión durante la comida, en la charla, incluso en la hora de la siesta no pude dormir”, apuntó. Tal y como explicó, se debía a “lo que nos jugábamos”. Tenían todo el peso de toda una isla encima y la responsabilidad de saber que “ya se nos había escapado el año anterior”. Asimismo, aseguró que, a nivel social, deportivo y económico, CD Tenerife no se podía sostener otro año más en Segunda B. “Era muy importante quedar primeros de grupo y lo conseguimos, fue una ilusión muy grande”, agregó.

Sabían que, en la vuelta, el conjunto local les iba a apretar al máximo. En ese sentido, “teníamos que minimizar errores”, no se podía regalar nada. “Teníamos que jugar con la ansiedad de ellos y las prisas que pudieran tener. En la primera parte tuvieron el control, pero porque tenían que arriesgar más”, señaló. En la segunda parte cambió la cosa a raíz del gol en contra. “Recuerdo que cuando nos marcaron miré el marcador y al ver que quedaban 25 minutos me entró una angustia por todo lo que nos quedaba por sufrir”, reveló.

Hay muchas anécdotas del partido de vuelta como el falso pitido final. Así lo vivió el que fue mediocentro del CD Tenerife: “No recuerdo si era una falta o un fuera de juego. Pensábamos que todo había terminado y ya habíamos logrado el ascenso. Después de que se reanudara el juego tuvieron una falta o un balón colgado y estábamos todos con el corazón que se nos salía por la boca. Gracias a Dios pudimos despejarlo”.

Otra fue la celebración del gol de Raúl Llorente en el Helidoro. “Cuando la afición saltó al campo sobre Raúl me pilló de lleno porque yo fui el primero en ir a abrazarle. Además, recuerdo a algunos aficionados como Pacheco, chico del frente que es muy amigo nuestro y recuerdo que iba loco por ahí. Fue una locura”, dijo.

Luismi Loro finalizó la entrevista mencionando que “me haría mucha ilusión volver a reencontrarnos en primera división” e ir como técnico técnico al Heliodoro para disfrutar otro partido allí