Los pacientes de cáncer en Canarias están viviendo de primera mano las consecuencias de la llegada de la pandemia de la COVID-19 en el efecto que esta tiene en el proceso de su enfermedad. Tanto por la precaución que deben tomar tanto ellos, como sus familiares o personas con contacto estrecho, como por el retraso que se está experimentando en las consultas por el alto volumen de trabajo que tienen los sanitarios desde la aparición del virus.

Fernando Fraile, presidente de la AECC -Asociación Española Contra el Cáncer- en Las Palmas, ha asegurado en los micrófonos de COPE Canarias que, antes de que llegara la pandemia, la enfermedad seguía estando ahí, pero se estaban curando patologías de cáncer que “anteriormente eran mortales a corto plazo”.“Se estaban haciendo avances, sin embargo, con todo esto de la COVID no solo se han paralizado, sino que se está retrocediendo”.

“Los primeros meses son vitales”, ha señalado Fraile. Según el presidente de la asociación, tienen constancia de que las primeras consultas se están demorando. “Tras la primera cita en el centro de salud, cuando se deriva al paciente al especialista para que empiece la rutina del tratamiento, están pasando meses”. También se están demorando las operaciones consideradas “no urgentes”. “No son urgentes hoy, pero pueden llegar a serlo en unos meses”, destaca Fraile.

Una situación que tiene consecuencias directas en la vida de los pacientes, ya que, según el presidente de la asociación, en esta enfermedad hay dos cuestiones principales a atender: la atención inmediata y la investigación, y debido a la COVID-19 ambas se han visto afectadas.

“Los pacientes no asisten a las consultas si tienen la más mínima duda de patologías”, algo que también está repercutiendo en que los casos de cáncer “no se estén cogiendo a tiempo”.

Desde la Asociación Española Contra el Cáncer recalcan que, si para la población general el 2020 fue duro, para las personas con esta patología y sus familiares ha sido “muy estresante”, ya que han vivido con una “gran incertidumbre y soledad”.“Estas personas comprometen su salud cuando salen a la calle o ven a otra persona”.

Insisten en que emocionalmente ha perjudicado mucho a los pacientes de cáncer, ya que se sienten solos en el proceso de la enfermedad. Desde la asociación han querido recordar que están disponibles para ayudar a estas personas de forma desinteresada y todo el que les necesite puede ponerse en contacto con ellos.