Gran Canaria permanecerá en nivel 3 de alerta sanitaria, sin embargo flexibiliza las condiciones al retrasar el toque de queda, pasando de las 22 horas a las 23 horas, según el portavoz del Gobierno, Julio Pérez: “Después de un estudio que ha realizado la hostelería en conjunción con los operadores, se entiende que es posible ampliar en una hora la movilidad de una persona y por tanto ampliar la actividad de hostelería y restauración.” El cambio de horario entrará en vigor desde su publicación en el BOC.

El portavoz advierte de que esta mejora se produce: “No sólo porque hay una mejor información con los sectores interesados tamicen porque al llevar un año de pandemia, el conocimiento de la regla está siendo más extendido y mejor aplicado.”

Otra de las modificaciones permite abrir el uso de las piscinas cubiertas de titularidad pública siempre que sea motivada por uso terapéutico y manteniendo las medidas sanitarias. Otros de los cambios que se ha aprobado hoy pero se pondrá en marcha en los próximos días supone permitir la movilidad entre las islas a aquellos pasajeros que presentan una prueba negativa en coronavirus independientemente del nivel de alerta sanitaria.

El consejero reconoce la buena evolución de Gran Canaria pero advierte que continúa con niveles altos de contagios ya que durante los últimos 15 días suma una media diaria de 80 casos, más preocupante es la situación de Tenerife con una media de 100 contagios diarios, Pérez también mostró su preocupación con los niveles de casos en la isla de El Hierro que pasa de nivel 1 a 2.