Jennifer Gopar es una madre de dos hijos que ha tocado a las puertas de COPE Gran Canaria para denunciar la dura situación que está viviendo. Tiene dos hijos y desde que comenzó la pandemia se quedaba sin el trabajo en el que había estado ocupada los últimos 5 años: empleada del hogar. Sin embargo, dado que no estaba dada de alta en la Seguridad Social, no ha podido percibir ningún tipo de prestación ni se encuentra en un ERTE.

Ahora, tras más de un año y medio de pandemia, sobreviven ella y sus hijos gracias a la manutención que recibe por uno de ellos de 250€ y acudiendo al Banco de Alimentos a recoger comida que, según apunta, no le cubre las necesidades más allá de una semana.

“Cuando trabajaba ganaba 10€ la hora. Al final vivía con 400€ al mes que no es mucho, pero podía salir adelante”.

Jennifer en enero entregó todos los papeles para solicitar el Ingreso Mínimo Vital, sin embargo, le vino rechazado por los 250€ que percibe la familia. “He gestionado de nuevo los papeles a ver si ahora me la dan”, advierte. Asimismo, hace 3 meses que presentó la solicitud a la ayuda de emergencia del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria y aún no ha obtenido respuesta.

“Hablo con la asistenta social y me da largas.”

Esta madre asegura que los 250€ no le dan para subsistir todo el mes con sus hijos, a pesar de que ellos de lunes a viernes comen en el comedor escolar con cuota 0. “Al menos tienen así la comida cubierta”. Los fines de semana se complica la situación. Tampoco puede afrontar los gastos de la vivienda y tiene deudas. “Con el dinero que percibo todos los meses es muy difícil”.

Jennifer denuncia que desde el Consistorio capitalino le informan de que hay mucha demanda y que los plazos están muy lentos. Sin embargo, ella destaca que no puede esperar. “No puedo aguantar mucho más así”.