El confinamiento y otras situaciones derivadas de la crisis de la COVID 19 han tenido un gran impacto en nuestra psicología. El no poder salir de nuestros domicilios salvo si es imprescindible, y las noticias que nos llegan a diario sobre los contagiados y fallecidos por causa del virus, además de la incertidumbre respecto a la situación económica, tienen impacto en nuestra salud mental. Nuestra mente ha tenido que adaptarse a una situación inédita.

En los micrófonos de La Mañana de COPE en Gran Canaria estuvo Virginia Suárez, vocal de desastres y emergencias del Colegio de Psicología de Gran Canaria, que habla sobre los efectos que ha tenido esta crisis sanitaria en nuestra salud mental. Comienza hablando de las familias que han tenido a algún miembro afectado por el virus. “Las familias entran en un estado de angustia porque esta pandemia está muy relacionada con la muerte”, comenta. Suárez subraya la importancia de la comunicación con familiares y personal sanitario.

“Es importante que las familias tengan unas pautas determinadas, conocer las reacciones que el afectado puede experimentar”, explica. Además, añade que la ayuda psicológica es fundamental, y que el aislamiento va en contra de la naturaleza social del ser humano. En los casos de familias que han perdido a seres queridos. La psicóloga afirma que el coronavirus ha provocado que tengamos que cambiar nuestra forma de afrontar el duelo, ya que no hemos podido despedirnos de nuestros familiares como lo solíamos hacer.

Virginia Suárez cuenta las diferentes patologías que se están produciendo en este periodo. Cree que esta situación de incertidumbre está generando mucha ansiedad y angustia. Asimismo, añade que el ciclo del sueño se ha visto trastocado por cambios en la rutina. Dice que esta situación también puede agravar patologías previas. En el caso de los niños, hay casos donde los padres notifican que se les ve más irritados.