El equipo de Pepe Mel aprovechó de inmediato su inspiración. A los 20 minutos de juego, ya habían celebrado los amarillos dos goles. Y también disfrutaron de una ocasión primera que salvó cerca de palos un zaguero a remate de Sergio Araujo, cuando ya Chichizola no podía reaccionar.

El peligro inicial grancanario llegó en los saques de esquina. Sobre la portería de la grada Curva se volcaron los amarillos buscando con mucha intensidad la primera ventaja. Y esa se fraguó a través de un penalti, tras una mano involuntaria de un zaguero del Cartagena.

Maikel Mesa asumió la responsabilidad de la ejecución y esquivó la oposición de Chichizola con un disparo a lo Panenka. Siete minutos después llegó el 2-0, en una acción combinada por la banda derecha. Ale Díez prolongó un balón para que Pejiño activara un slalom personal buscándose un hueco entre los defensores visitantes. Desde la frontal lanzó un zurdazo que se coló junto al poste.

La mejor opción del Cartagena fue obra de Rubén, con un lanzamiento al larguero aunque con una acción anulada con posteriormente al decretarse fuera de juego. Los centrales no le quitaban la vista al jugador que, en unos días, cumplirá 20 años en el fútbol profesional tras su debut en la UD Las Palmas (2001). Y al borde del descanso, el 7 grancanario también puso a prueba los reflejos de Alex Domínguez, que regresó a la titularidad.

Por unos minutos en la segunda mitad, hasta cinco jugadores del Cartagena en el campo eran ex jugadores de la UD Las Palmas. Sin embargo, se lesionaba De la Bella y a los cinco minutos debía ser relevado. Luego se incorporaría desde el banquillo Nacho Gil.

Las Palmas pudo incrementar su tranquilidad en la última media hora. Además del tanto anulado a Eric Curbelo, atento a un rechace de Chichizola, los atacantes Jesé y Pejiño tuvieron sus opciones ante el meta argentino pero no mostraron la precisión de los primeros minutos. Jesé puso las ganas en los minutos finales, con varias ocasiones que desbarató el arquero visitante.