El Herbalife Gran Canaria toma oxígeno, de nuevo gracias a la Eurocup, con su triunfo sobre el Frutti Extra Bursaspor (74-95) en Turquía. El conjunto de Porfi Fisac, que sumaba cuatro derrotas consecutivas, construyó una victoria impecable que se cocinó en el arranque del partido (un parcial de 2-15 fue determinante) que le permitió vivir comodamente un tramo final en el que no contó con Willey ni Costello, eliminados con faltas personales.

El acierto anotador de Shurna (18 puntos) y Dimza (16) fue uno de los elementos claves de la victoria insular en su visita a Turquía.

En los momentos más comprometidos del partido el cuadro insular fue capaz de mantener el tipo gracias a la intesidad que mostró sobre la pista, ese que tanto había demandado en sus comparecencias ante los medios de comunicación su entrenador. A pesar del buen partido anotador de Shurna y Dimza, el sacrificio coral, con unos Costello y Beirán que firmaron también 11 puntos cada uno, fue uno de los elementos más destacado en el análisis del triunfo de la armada claretiana.

Con este resultado se apagan algo los tambores de crisis en el club. El mal comienzo de la temporada, especialmente en la Liga Endesa, hacía sonar en el entorno del club la posible destitución del entrenador. Hecho que finalmente queda en espera después de un triunfo clave para seguir adelante en la Eurocup.

Los próximos días el Gran Canaria vuelve al trabajo para preparar su próximo partido en la Liga Endesa, ante el Obradoiro de Albert Oliver, una fecha del calendario que servirá para valorar si lo de la Eurocup es un parche a las constantes fugas de agua que tiene el equipo o el comienzo de una reacción.