Ocho semanas de confinamiento para el Museo de Bellas de Asturias son muchas para quienes disfrutan de la pintura. El Museo ha reabierto sus puertas después de dos meses con todas las garantías de seguridad y en las mejores condiciones. Como dice su director, Alfonso Palacio, queremos que nos siga visitando mucha gente pero en las mejores condiciones. Había por lo tanto ganas de reapertura, y de hacerlo bien, con todas las medidas para que el Museo pudiera contribuir en su dimensión con esta denominada nueva normalidad. Alfonso Palacio señala que durante estas ocho semanas han trabajado mucho a la hora de elaborar un plan de contingencia y reconfigurar las instalaciones para su reapertura, llegando muy resonsabilizados y muy contentos. El director del Museo destaca además la importancia de esta semana en la que se celebraba el Día Internacional de los Museos y también el 40 aniversario de la apertura del Museo de Bellas Artes de Asturias.

Dentro de unas semanas, a mediados de junio, está prevista una exposición de Orlando Pelayo y, a primeros de julio una exposición de obras de Miró. Ahora se trata de coger velocidad de crucero, asegura Alfonso Palacio, que tiene claro que el concepto de visitas museísticas va a cambiar, con un trato más intimo entre visitante y obra. A Alfonso Palacio no le preocupan las cifras de visitantes a final de año debido al parón. Señala asímismo qeu para ser un museo de escala media, pasaremos esta crisis económica que se avecina de manera menos cruda que otras pinacotecas que dependen más de fondos privados. Apostilla que nos viene por delante un auténtico reto.