Los tráficos del Puerto de Gijón han descendido un 14 por ciento en los primeros nueve meses de este año respecto al mismo periodo de 2019, una baja impulsada por la fuerte caída de los graneles térmicos y siderúrgicos, según ha informado este jueves el Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria.
La carga y descarga de estos minerales ha acumulado un descenso del 43 por ciento en los nueve primeros meses de este año, mientras que los líquidos han bajado un 20 por ciento en gasolinas y gasóleos y un 43 por ciento en butano.
El Consejo de Administración de El Musel ha atribuido estos resultados a la crisis sanitaria por la covid-10 que "se ha dejado sentir" en la actividad portuaria y ha apuntado que la mercancía general también se ha resentido por un menor movimiento de productos siderúrgicos con un 8 por ciento menos.
En la reunión del Consejo celebrada hoy, se ha aprobado los pliegos de licitación para la construcción de un cierre perimetral con un presupuesto de 1,.7 millones de euros y también se ha adjudicado, por 3, 1 millones a la empresa Apartamentos Miramar, el inmueble de la calle Claudio Alvargonzález, que albergó durante décadas la sede del puerto de Gijón.