La Comisión Directiva de Foro Asturias ha acordado este jueves llevar a los tribunales los resultados de una auditoría con los gastos del partido entre los años 2011 y 2014, cuando era máximo responsable de la organización Francisco Álvarez-Cascos ante las "graves irregularidades" detectadas.

La actual dirección del partido, liderada desde septiembre de 2018 por la ex alcaldesa de Gijón Carmen Moriyón, ha tomado esta decisión a raíz de conocer cuestiones como que la formación cuenta con una sede en el Paseo de la Castellana de Madrid, de la que se desconocía su existencia.

"Lo desconocíamos. No hay personal contratado y nadie acudió", ha puesto de manifiesto Moriyón que no ha querido dar más detalles de las irregularidades, aunque algunos medios filtran hoy que Cascos habría cobrado un millón de euros en sueldos en ocho años y pasado gastos que, en principio, nada tenían que ver con la actividad política.

Moriyón ha evitado decir contra quién se interpondrán las medidas judiciales, aunque ha afirmado que "donde hay un mando, la responsabilidad es del mando", en referencia a Álvarez-Cascos, y ha recalcado que esta decisión se ha adoptado por "decencia política".

No obstante, ha afirmado que se siente "engañada" y decepcionada" por Álvarez-Cascos, que dimitió de su cargo de vicepresidente tras sus disputas con Moriyón tras los resultados electorales autonómicos de 2019 -en los que pasó de tres a dos diputados en un hemiciclo con 45 escaños- y con la que mantiene un enfrentamiento abierto desde entonces, que se hace extensible al grupo parlamentario, cuyos dos únicos diputados se alinean con ambas tesis.

"Como presidenta llevé a cabo un mandato de la comisión directiva y ahora no voy a meterla en un cajón", ha dicho sobre una auditoría que también dará cuenta de los gastos producidos entre el periodo comprendido entre 2014 y 2019.

Por otro lado, ha informado de que el objetivo de la dirección actual es que la deuda de 346.000 euros que tenía el partido hace unos meses pase a ser de 83.000 cuando acabe el verano.

La Comisión Directiva de Foro también ha ratificado, con 22 votos a favor y uno en contra, la decisión del Comité de Garantías Estatutarias de expulsar del partido de Pedro Leal, uno de los dos diputados con los que cuenta en la Junta General del Principado, por considerarle culpable de cuatro infracciones muy graves y otras tres graves.

Foro dispone de dos diputados en el parlamento asturiano: el portavoz, Adrián Pumares, que se encuentra también al frente de la Secretaría General de la formación, y Leal, enfrentado con su compañero de grupo y alineado con las tesis que defiende el fundador del partido Álvarez-Cascos.

Dado que en la Junta General del Principado hay que disponer de un mínimo de dos diputados para que puedan constituirse en grupo parlamentario, con la expulsión de Leal, Foro dejará de cumplir con ese requisito y ambos parlamentarios pasarían a conformar el Grupo Mixto, cuestión que Pumares ha dejado en el aire puesto que aún no sabe qué decisión adoptará su compañero.

"El hecho que pasemos al Grupo Mixto o no es irrelevante después de lo que he tenido que aguantar", ha dicho sobre las disputas de las últimas semanas con Leal.

DENUNCIA CONTRA MORIYÓN

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Apenas unas horas antes de que se reuniese la directiva de Foro, un grupo de 197 militantes registraba un escrito en el que piden incoar un expediente disciplinario a Moriyón por vulneración de estatutos, dejación de funciones y "maniobras arbitrarias" de modificación de la Comisión Directiva, "constitutivas de abuso de poder" desde que renunció al escaño obtenido en las elecciones de mayo y decidió continuar como presidenta del partido.

El escrito sostiene que las infracciones de Moriyón pueden tipificarse como "muy graves", por lo que, según los militantes, "procede que se adopten medidas cautelares de suspensión provisional de su cargo".

"Moriyón sigue convocando reuniones y adoptando acuerdos, a pesar de estar impugnadas judicialmente las exclusiones arbitrarias de tres miembros legítimos elegidos en el III Congreso", sostienen los afiliados.

En este sentido, Pumares ha desvelado que en las últimas semanas muchos militantes han tenido que "soportar llamadas" para presionarles que firmaran el escrito, del que, a su juicio, tiene "difícil encaje estatutario"