La confianza de los empresarios asturianos de cara al cuarto trimestre del año ha subido un 12,6 por ciento respecto al tercer trimestre, la segunda mayor mejora del país, aunque el pesimismo sigue siendo la nota predominante, según los datos publicados este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Se trata del segundo trimestre de mejora, tras el repunte del 5 por ciento de hace tres meses y después del desplome del 26,7 por ciento en la encuesta de cara al segundo trimestre debido a la crisis sanitaria de la COVID-19.

La estadística del INE refleja que el 9,7 por ciento de los empresarios asturianos son optimistas de cara al cuarto trimestre, frente al 44,9 por ciento que son pesimistas y el 45,4 por ciento que dice tener unas expectativas normales.

En el conjunto del país, la confianza de los empresarios de cara al cuarto trimestre de este año ha experimentado un aumento del 10,5 %, hasta los 105,5 puntos, lo que representa el mayor incremento de la serie histórica de este indicador que comenzó a elaborarse en 2013.

Según el Índice de Confianza Empresarial Armonizado (ICEA), el segundo mayor incremento (5,5 %) se registró en el tercer trimestre de 2013.

Esta mejora se ha producido tras el desplome de la confianza de los empresarios en el segundo trimestre del año con la crisis del COVID-19, marcando el valor más bajo de la serie histórica que se mantuvo en el tercer trimestre.

Al detalle de las respuestas, con vistas al cuarto trimestre, el 8,1 % de los gestores de establecimientos empresariales considera que la marcha de su negocio será favorable, mientras que el 49,4 % opina que será desfavorable y el 42,5 % restante considera que será normal.

Esto deja un saldo, denominado balance de expectativas -que es la diferencia entre el porcentaje de respuestas favorables y desfavorables-, que se sitúa en -41,3 puntos, frente a los -47,2 puntos del trimestre anterior.

Todos los sectores han incrementado su confianza respecto al tercer trimestre, siendo la construcción el más optimista con un aumento del 14 %, seguida por la industria (12,6 %), otros servicios (11,3 %), el transporte y la hostelería (8,4 %) y el comercio (6,6 %).

En función del tamaño de la empresa, son las grandes compañías (más de 1.000 empleados) en las que más sube la confianza de cara al cuarto trimestre, un 15,5 %.

Le siguen las de 200 a 999 trabajadores (13,7 %); de 10 a 49 (10,5 %); de 50 a 199 (9,5 %), y las microempresas, de menos de 10 empleados, aumentan su confianza un 9 %.

Por regiones, la confianza empresarial de cara al cuarto trimestre del año mejora en todas las comunidades autónomas, siendo Cantabria, con un 16,2 %, la que mayor incremento experimenta.

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Por detrás se sitúan Aragón, Asturias, Cataluña y Galicia (todas con un aumento del 12,6 %), Comunidad Valenciana (12 %), Castilla y León (11,4 %) y Andalucía (11,1 %).

Por debajo de la media nacional aumenta la confianza en Madrid (10,1 %), La Rioja (8,6 %), Murcia (8,4 %), Extremadura (8,3 %), Canarias (8,2 %), Baleares (7,1 %), Navarra (6,9 %), País Vasco (6,9 %) y Castilla-La Mancha (5,9 %).

Respecto a la situación del trimestre que acaba, marcado por la vuelta a la normalidad y los rebrotes una vez terminado el estado de alarma, el saldo, negativo de 38,8 puntos, mejora el de expectativas manifestadas previamente para este trimestre (-47,2 puntos).

Asimismo, es menos bajo que el del trimestre anterior, cuando marcó un mínimo de la serie histórica con -62,8 puntos.

El INE explica que la recogida de datos para estas previsiones del cuarto trimestre se realizó del 15 de septiembre al 5 de octubre, mientras que la del tercero tuvo lugar tras el estado de alarma (del 15 de junio al 6 de julio).