El presidente del Principado de Asturias, el socialista Adrián Barbón, ha anunciado este sábado una serie de cambios en su Gobierno para hacer frente a la "nueva normalidad". Cambios que afectan a las consejerías de Presidencia, Infraestructuras y Desarrollo Rural, con los que pretende abordar la modernización y puesta a punto de la administración asturiana.

Esa "puesta a punto" de la Función Pública será asumida por el vicepresidente del Gobierno, Juan Cofiño, que también dirige la 'Comisión delegada para reconstrucción y asuntos económicos', con el propósito de analizar debilidades y fortalezas de la administración y ver "dónde puede sobrar personal y dónde puede faltar" así como "actualizar los medios tecnológicos" y evaluar "el papel del teletrabajo". El nuevo departamento, bajo el nombre de 'Consejería de Administración Autonómica, Medio Ambiente y Cambio Climático'.

Asimismo, el área de Infraestructuras, hasta ahora dependiente del vicepresidente Cofiño, se unirá la Consejería de Medio Rural de Alejandro Calvo, por estar "tan ligada a la cohesión territorial, a la protección del medio rural, a la necesidad de incorporar una nueva red de infraestructuras y de transporte, y que ponga en valor el medio rural". Se denominará 'Consejería de Medio Rural y Cohesión Territorial'.

"Son dos adaptaciones que entiendo lógicas porque si cambia todo, si cambiamos nosotros mismos, si cambian las prioridades, lo lógico es, manteniendo el número de consejeros y consejeras, hacer una reformulación del Gobierno para responder a estas nuevas realidades", ha argumentado el presidente asturiano.

Barbón ha resaltado la importancia que ha ganado el medio rural durante la pandemia, con cada vez más ciudadanos que piensan en comprar o arreglar viviendas familiares en pueblos para ganar "calidad de vida". Así, entiende que van a ser clave, más que antes si cabe, las políticas de comunicaciones y conexión con el centro de Asturias.

Igualmente, ha insistido en la necesidad de actualizar la administración para "aprovechar lo bueno" y "aprender de realidad comparada con otras administraciones, para ser más productivos y eficaces".

REFORMA DE LA ADMINISTRACIÓN

Adrián Barbón ha recordado que el año que viene se cumple el 40 aniversario del Estatuto de Autonomía de Asturias, con el que nació la actual administración autonómica de la mano del presidente Pedro de Silva y el consejero Bernardo Fernández. Una administración que, dice, fue pensada para el siglo XX y que ahora requiere "una reforma muy amplia para ponerla a punto y que responda a las necesidades del siglo XXI".

Ha asegurado que dicha reforma se tendrá que hacer en la presente legislatura y se ha comprometido a que sea "dialogada", remarcando que requiere de aprobación por parte de la Junta General. "Nos tiene que dar tiempo en esta legislatura", ha dicho, apostando por una administración "más ágil, eficaz, productiva y sostenible".

Una reforma, afirma, que no puede ser "flor de un día" y que podría llevar aparejada, entre otras medidas, la movilidad de puestos dentro de la administración.

Barbón ha añadido que, con este cambio, Función Pública dependerá del vicepresidente Juan Cofiño y no de la consejera de Presidencia, Rita Camblor, que seguirá manteniendo el resto de competencias.

El cambio en la estructura del Ejecutivo llevará aparejados nombramientos, también aquellos que están pendientes como el de la Intervención General, tras el cese a petición propia hace dos semanas de Ana Masa Timón. Al respecto, el presidente asturiano ha asegurado que el propósito es "no incrementar el numero actual de miembros del Gobierno".