La baja incidencia de la pandemia en el Principado "se ha convertido en el mejor atractivo de la marca Asturias" por lo que, según el presidente regional, Adrián Barbón, "Mantener la comunidad a salvo de la COVID-19 no tiene precio" en pleno periodo vacacional.

Durante la clausura de la asamblea que la Asociación Asturiana de Empresa Familiar ha celebrado este lunes en Las Caldas, el jefe del Ejecutivo regional ha incidido en que, además de ser una prioridad, salvar vidas ha demostrado su relevancia económica en sectores como el turismo.

Si los contagios hubiesen golpeado con más fuerza a Asturias, la primera comunidad autónoma que primero y durante más tiempo cumplió un periodo completo de incubación sin registrar infectados el pasado mes, "los perjuicios empresariales y laborales serían muchísimo mayores", ha incidido el presidente, para quien no se puede caer en el error de pensar que la economía va por un lado y la salud pública por otro".

"En estas circunstancias, asegurar la salud es el mayor apoyo que podemos prestar a las empresas familiares, a todas nuestras empresas", ha afirmado Barbón, que ha incidido en que las cautelas del Ejecutivo asturiano durante la pandemia "estaban justificadas".

A estas alturas de julio hay que aspirar a que la normalidad "permita mantener Asturias abierta, activa y en marcha", algo que, según Barbón, puede parecer sencillo, pero en lo que no hay que relajarse.

CLAUSURA AEFAS

El presidente del Principado ha enfatizado durante la clausura de la asamblea que la Asociación Asturiana de Empresa Familiar "la importancia de que sus empresas puedan continuar funcionando -y, a poder ser, creciendo- porque ese es el mejor motor posible para acelerar la recuperación. Para Asturias, donde el porcentaje de micropymes es tan alto, cuidar el tejido empresarial resulta básico".