El Principado extenderá la conexión a Internet por banda ancha al 97 % de la población, tanto en la zona rural como en el medio rural, con una inversión de doce millones y medio de euros. El proyecto permitirá la llegada de la fibra óptica hasta el hogar, a 42.831 viviendas y empresas que hasta ahora no tenían acceso a esta tecnología. Del total de la inversión, nueve millones proceden de una subvención del Ministerio de Transformación Digital.

Asturias es la comunidad uniprovincial que más dinero ha conseguido del Programa de Extensión de la Banda Ancha puesto en marcha por el gobierno central para que los operadores de telecomunicaciones extiendan la cobertura a zonas que en estos momentos carecen de este servicio, lo que se conoce como “zonas blancas”, donde la velocidad de conexión a Internet es inferior a los 30 Mb. En el caso del Principado, estas áreas se sitúan en el suroccidente, centro y oriente de la comunidad, con un total de casi 50.500 “unidades inmobiliarias”, tanto viviendas como empresas.

La empresa “Adamo” es la compañía que se ha alzado con la concesión para desplegar la fibra en esas zonas, con el objetivo de que, a finales de 2021, sólo queden 7.600 unidades en “zona blanca”, lo que supone menos del 3 % de la población asturiana. Son viviendas y locales que se encuentran en zonas donde resulta imposible, por anti económico, la llegada de la fibra y para las que ya se están estudiando soluciones alternativas a través de redes móviles, como el futuro 5G.

ROAMING RURAL

Una de las ideas que baraja el Principado para extender y mejorar la conectividad de la zona rural, es la puesta en marcha del “roaming rural”. Este sistema se basa en la posibilidad de ir cambiando automáticamente de compañía en función de la que ofrezca cobertura en cada zona, igual que ocurre cuando viajamos al extranjero. Asturias ya ha trasladado la propuesta al ministerio, pero su posible implantación dependería, en último caso, del acuerdo entre empresas.