Una ruta por la costa oriental del Principado permite pisar la misma tierra en la que dejaron sus huellas, hace millones de años, los dinosaurios.
Marcos Martín B.
Tiempo de lectura: 1' Actualizado 15 jul 2019
Asturias fue, hace millones de años, tierra de dinosaurios. Y hoy, en pleno siglo XXI, aún se puede disfrutar de los vestigios de aquellos gigantescos animales que habitaron el planeta antes de extinguirse. Por eso, el Principado tiene el MUJA, el Museo del Jurásico, donde se pueden ver recreaciones de cómo vivían los dinosaurios 'asturianos'.
Pero la herencia de los dinosaurios en Asturias va mucho más allá. A lo largo de parte de la costa oriental de la comunidad, la tierra aún recuerda las pisadas de los animales, con huellas que se pueden ver desde Gijón hasta Ribadesella.
A lo largo de este tramo de costa asturiana, pueden visitarse nueve yacimientos de icnitas de dinosaurios, localizados en los concejos en Villaviciosa, Colunga y Ribadesella. Hasta el momento, han aparecido casi 500 huellas. Así, en la Costa de los Dinosaurios se pueden ver huellas en las playas de Merón, La Griega, La Vega y Ribadesella; los acantilados de Luces, Lastres y Terelles y en el Puerto y el Faro de Tazones.
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