El Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) ha incorporado la impresión 3D para la fabricación de corsés médicos para tratar la escoliosis idiopática del adolescente, una herramienta terapéutica que en Asturias está indicada para unas 175 personas.

El complejo sanitario ha desarrollado un prototipo de corsé elaborado con esta tecnología, cuya producción puede llevarse a cabo en veinticuatro horas, supone un elevado ahorro de costes y se ajusta mejor a la espalda de los pacientes, que deben llevarlo entre 20 y 22 horas al día.

Así lo ha indicado este lunes el jefe de Infantil y Protésis del Servicio de Rehabilitación del HUCA, José Antonio Fidalgo, durante la presentación de la técnica, un acto en el que han participado los consejeros de Salud, Pablo Fernández, y el de Ciencia, Innovación y Universidad, Borja Sánchez.

"Debemos tratar que el corsé sea la mejor herramienta posible para que la curva de la espalda no progrese y se evite en un futuro la intervención quirúrgica", ha señalado el doctor sobre una dolencia que se diagnostica, mayoritariamente, en niñas de entre 12 y 13 años.

Según ha explicado, el sistema de impresión 3D confecciona corsés "iguales de eficaces" que los que se elaboran con otros métodos, si bien cuenta con un "elemento diferenciador importante" como es el coste que supone para las arcas sanitarias, que se eleva hasta 600 euros por cada pieza.

El objetivo es que estos corsés estén totalmente sensorizados en un futuro para reportar de forma constante información a los profesionales sanitarios sobre su uso.

Este proyecto "eHealth" forma parte de las misiones científicas que el Gobierno autonómico ha puesto en marcha en cada uno de los cinco ámbitos que componen su estrategia de especialización inteligente (S3) como son el agroalimentario, el energético, la industria 4.0, la salud y envejecimiento activo y otro que impulsa Asturias como un lugar atractivo para vivir.

Desde el año 2016, el HUCA ya dispone de una mesa innovadora de toma de muestras para la elaboración de estas herramientas terapéuticas, que permite hacerlo de manera más personalizada, según los patrones de curva, y permite conocer "qué presiones está tolerando el paciente para compensar la deformidad de la columna".

En el acto de presentación, el consejero de Salud ha subrayado que este es un proyecto pionero "importantísimo" que va a "cambiar" la vida de muchos jóvenes con escoliosis, con el que además se sitúa al Principado como una "referencia internacional" en el diseño de corsés.

En la misma línea se ha pronunciado el consejero de Ciencia, quien ha dicho que este es un ejemplo de "éxito", lo que pone de manifiesto la importancia de trabajar en el ámbito de la innovación sanitaria.