El Sporting y el Oviedo juegan este sábado el derbi más relevante de las últimas cuatro temporadas. A la rivalidad de siempre se suman el momento de los dos equipos y el escaso margen que restará para el final de la Liga cuando acabe el partido de El Molinón.
Hace un año, tras el confinamiento, el Oviedo llegaba aún más necesitado y el Sporting intentaba alcanzar un 'play off' que siempre vio de lejos. Pero las actuales circunstancias son distintas. Los azules pueden acercarse al peligro del que se escaparon un curso atrás. Los rojiblancos están asentados en la zona de privilegio, pero una derrota puede amenazar la estabilidad de toda una temporada.
El Sporting, con siete importantes puntos más que el séptimo, ha perdido los dos últimos encuentros, algo que no había ocurrido hasta ahora y que le ha dejado sin opciones de ascenso directo. El 'play off', eso sí, es un gran premio. El Rayo le puede adelantar este miércoles; el Girona, aún distanciado, es la gran amenaza. Si gana el derbi, el conjunto de Gallego tendrá muy cerca la clasificación para la fase de ascenso. Un tropiezo pondría a prueba al equipo, que visitará de forma consecutiva al Zaragoza y al Leganés.
El Oviedo, si gana o al menos puntúa, aumentará o quizá mantendrá distancias con el descenso. El calendario tras el derbi también trae curvas. El equipo de Ziganda, que ahora ve el descenso a solo cinco puntos y acumula siete partidos sin ganar (solo ha ganado dos encuentros en 2021), recibirá al Girona y viajará a Almería antes de las últimas cinco jornadas de la temporada.