Los 250 miembros de las Fuerzas Armadas que desde el pasado mes de octubre han estado desarrollando en Aragón la labor de rastreadores de casos COVID, dejan desde hoy de cumplir esta función gracias a la mejoría que ha experimentado la situación en nuestra comunidad.

Durante estos 270 días consecutivos han hecho más de 300.000 llamadas para detectar posibles contagios y comunicar positivos a quienes habían contraído la enfermedad. Hoy la delegada del Gobierno, Pilar Alegría y la consejera de Sanidad Sira Repollés, en su visita al Hospital Militar de Zaragoza, les han dado las gracias personalmente por el servicio prestado en estos últimos 8 meses. Una colaboración muy valiosa y un servicio de gran calidad, como destacaba la consejera. Esta colaboración ha formado parte de la llamada 'Operación Baluarte' del Gobierno y el Ejército, para hacer frente a los peores momentos de la pandemia.

En esta visita, la consejera de Sanidad ha anunciado que Aragón va a distribuir esta semana 116.000 dosis de la vacuna contra el coronavirus. Esta va a ser una de las semanas en las que se repartan más vacunas en nuestra comunidad y 75.000 corresponderán a segundas dosis. Gracias a la buena marcha de la campaña de vacunación, un 40% de la población aragonesa ya está inmunizada totalmente.

Vacunas que son igualmente efectivas para combatir las nuevas cepas que puedan surgir, como es el caso de la variante Delta. La consejera de Sanidad, que está convencida de que el número de casos aumentará en los próximos días como ocurrió con la cepa británica, asegura que todo esto no va a modificar la estrategia de vacunación que hay prevista en Aragón para las próximas semanas.

En relación a los 10 estudiantes de Alcañiz que dieron positivo tras acudir a un viaje de fin de curso a Mallorca junto a 4 compañeros más, no hay novedades. Todos sus contactos se encuentran aislados.

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