El exzaragocista David Villa ha anunciado este miércoles su retirada del fútbol profesional a final de año tras casi dos décadas dedicadas a marcar goles. Actualmente en el Vissel Kobe de Japón, su paso por el Real Zaragoza entre 2003 y 2005 le permitió hacerse un hueco en la élite e iniciar una carrera de títulos y éxitos.

No en vano, el "Guaje" aterrizó en La Romareda en julio de 2003 por algo menos de tres millones de euros, siendo uno de los primeros fichajes tras el ascenso a Primera División con Paco Flores en el banquillo. Sus comienzos, como el de todo delantero joven que llega a la máxima categoría, no fueron sencillos. Su primer gol llegó el 14 de septiembre en un 3-0 ante el Murcia, terminando la temporada con la cifra de 21 goles. En el recuerdo quedarán su póker ante el Sevilla y el gol de penalti ante el Real Madrid en la final de Copa del Rey en Montjüic.

Su segundo año en Zaragoza arrancó con otro título, la Supercopa de España ante el Valencia, y con su debut en competición europea, donde llegó hasta cuartos de final, cayendo en una mala noche del equipo ante el Austria de Viena. En total anotó 15 goles en Liga y 2 en Copa de la UEFA. A final de ese año se marchó al Valencia por 12 millones de euros, una cantidad que permitió la llegada al club blanquillo de hombres como Diego Milito, Ewerthon o Sergio García.

Al margen de su etapa en el Real Zaragoza, Villa se mantiene como el máximo goleador de la selección española, con quien debutó un 9 de febrero ante San Marino, todavía como jugador zaragocista. Con el combinado nacional ha marcado 59 goles en 98 partidos, alzándose con dos Eurocopas y el Mundial de Sudáfrica.

En su despedida en Japón, el asturiano ha recordado su etapa en la capital del Ebro. "El Real Zaragoza me dio la oportunidad de poder tener el sueño de todos los niños, debutar en Primera División, y tuvimos la oportunidad de ganar dos títulos", ha destacado.

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