El presidente de la Asociación de Hostelería de la provincia de Huesca, Carmelo Bosque, ha indicado que la actividad hostelera llevada a cabo durante esta Semana Santa ha supuesto una “bocanada de aire fresco” para un sector muy castigado por la pandemia y que mira con más optimismo hacia el verano.

Bosque ha apuntado que la Semana Santa ha dejado en la provincia de Huesca cuatro días excepcionales en cuanto a la meteorología se refiere y eso ha favorecido, en gran medida, el movimiento que los aragoneses han realizado dentro de la comunidad autónoma, ya de por sí deseosos de disfrutar de unos días festivos y de descanso. El Pirineo ha sido visitado y restaurantes y terrazas han visto actividad, lo que ha dado una “bocanada de aire fresco”. El presidente de este colectivo ha dicho que “siempre hemos dicho que nosotros somos los que generamos felicidad y los que hacemos sociedad y lo hemos vuelto a ver, la sociedad ha venido a nosotros y ha llenado terrazas” y “hay que seguir avanzando, porque el ocio nocturno está cerrado, el mundo del evento paralizado y suma y sigue”, pero “sin duda, esto ha sido importante para mirar hacia el verano”.

En cualquier caso, Bosque ha hecho hincapié en que “aunque hayamos visto actividad durante estos días, la hostelería no está normalizada”, ni en cuanto a horarios ni aforos. Por ello, el sector pide a las administraciones que sigan tomando medidas más flexibles. En este punto, piden ampliar una hora su horarios de apertura al público y pasar de 4 a 6 personas en el interior de los locales y de 6 a 8 en el exterior. Bosque también ha dicho que el sector de la hostelería debe ser vacunado ya. “El sector debe reivindicar ya que sea vacunado, porque, aunque seamos la solución y no el problema, como algunos piensan, tendremos entonces que ser vacunados”.

Ahora, la hostelería mira hacia el verano y Carmelo Bosque habla de la competencia a la que tiene que hacer frente Aragón turísticamente hablando. Así, ha dicho que “mientras tanto, nos preparamos para competir con el turismo en comunidades y es que Aragón se tiene que preparar para el turismo de este año, que va a suponer una competencia entre comunidades y tenemos que estar allí, para trasladar excelencia a la gente y poner en valor lo que tenemos que es mucho, ocio, naturaleza, patrimonio o gastronomía”. En su opinión, “lo tenemos todo para salir adelante”.