Año histórico, con estas palabras califica el presidente de la comunidad de regantes, César Trillo, el año hidrológico que está a punto de terminar. El Presidente de Riegos afirma que nunca antes habían tenido a mitad de julio los tres principales embalses llenos al 100% tras una primavera muy lluviosa que dejó unas aportaciones nunca vistas.

Reconoce al mismo tiempo un consumo histórico este verano, especialmente el mes de agosto y medio septiembre, motivado por las altas temperaturas y la siembra tardía de algunos cereales. Pese a todo, cerrarán su campaña de riego, entorno a la festividad del Pilar, con remanentes en la reserva de agua para la próxima.

En estos momentos Búbal se encuentra al 10% de su capacidad, Lanuza al 27 y Mediano al 20, mejor aspecto presenta El Grado con el 88% de su capacidad.

Trillo reconoce un comportamiento del tiempo distinto pero sostiene que, de momento, no se refleja en las aportaciones a la cuenca del Ebro ya que se mantienen. Considera que deberán pasar muchos años para tener una estadística real que diga si estamos o no, ante un descenso de las precipitaciones.

En primavera ya se había superado el 100% de capacidad en muchos embalses pero el verano ha sido una estación con pocas precipitaciones en la provincia de Huesca.El delegado de AEMET en Aragón, Rafael Requena destacaba en el balance del verano que "aunque el verano ha sido tan seco, la primavera fue tan lluviosa que en mayo ya se superó la media del año agrícola. En este punto, Requena ha manifestado que “el 31 de agosto terminó el año agrícola y Huesca lo ha acabado con 575 litros en un año, cuando lo normal es no llegar a los 500, situarse por los 480 y de hecho esos 500 litros ya los había superado en mayo”.