Los eventos se desarrollan en espacios como el palacio de congresos, el teatro Olimpia o el centro cultural Manuel Benito Moliner, y la plaza Luis López Allué, entre otros, y con propuestas como la feria ‘sin condiciones’ que lleva hoy propuestas escénicas a Almudévar

Esta trigésimo quinta edición pone el foco en los nuevos lenguajes escénicos relacionados con la danza, el teatro y el circo, así como en la fusión de todos ellos con el audiovisual y las nuevas tecnológicos. Su codirector, Lucas Fernández, que, junto con la técnico municipal Pilar Barrio, dirige esta cita cultural ha afirmado que este evento tiene un marcado carácter profesional.

Uno de los aspectos destacados de la Feria es el Premio ‘Javier Brun’, en honor del técnico municipal del área de Cultura y uno de los artífices de la propia Feria que falleció el pasado año. En esta ocasión, el reconocimiento recaerá en Jean-Marc Broqua, director de Relaciones Internacionales de La Grainerie en Toulouse. Allí se ocupa, entre otros asuntos, de la coordinación de los proyectos internacionales, entre los cuales hay varios en los que participa el Ayuntamiento de Huesca. Además, Broqua mantuvo una estrecha relación con Javier Brun. El concejal de Cultura, es Ramón Lasaosa.

Teatro, Danza, Circo y todas sus variables de fusión a través de la investigación escénica.

La programación de la presente edición estará especialmente marcada por la fusión entre disciplinas escénicas, continuando con la línea habitual de programación de la Feria que ha prestado mucha atención a las nuevas dramaturgias y lenguajes escénicos.

Hoy, día previo al arranque de la programación principal en la ciudad de Huesca, tiene lugar el Almudévar la Feria Sin Condiciones, un espacio de reflexión y presentación de espectáculos especialmente pensados para el mundo rural.

Seis espectáculos en formato show case de veinte minutos de duración más dos propuestas, ya durante la tarde, en formato completo. Espectáculos que del mismo modo que la programación principal exploran diferentes disciplinas pero que cuentan con la peculiaridad de que pueden representarse en espacios sin dotación técnica previa.

La Feria sin condiciones es un proyecto que arrancó el año pasado y que ya en su primera edición contó con una amplia aceptación desde la corporaciones locales, menos dadas por sus propios condicionantes económicos y de espacios escénicos a participar de la programación de la feria y que vieron como se creaba un espacio ideado para poder cubrir sus necesidades específicas.